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gatos en invierno

¿Cómo debo cuidar de mi gato en invierno?

© Shutterstock shodography

Gatos en invierno: 10 cosas que un buen dueño o dueña de gato debería saber

Por Vanessa Parapar Periodista

Publicado el

El frío está llamando a la puerta de muchos hogares españoles, y con él llegan las preocupaciones: ¿Cómo cuidar de los gatos en invierno? ¿Puede mi felino dormir fuera? ¿Cómo afrontará mi mascota la bajada del mercurio? Respondemos a estas y otras preguntas.

El invierno está a la vuelta de la esquina. Desde hace días en algunas comunidades autónomas de España se ha registrado una notable bajada de temperaturas que ha puesto en alerta a sus vecinos. ¿Estamos ante una ola de frío en nuestro país? Desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) advierten que la posible rotura del vórtice polar podría traer a España una ''ola de frío ártico'' en las próximas semanas. 

Ante la disminución del mercurio -propia de esta estación del año-, toca hablar sobre cómo cuidar a los gatos en invierno. A continuación señalamos una lista de cosas que todo cuidador debería saber para proteger a su mascota durante los próximos meses. 

¿Los gatos pueden dormir afuera en invierno?

Sí, siempre y cuando el gato esté acostumbrado a estar al aire libre y a determinadas condiciones de vida. Es decir; si el gato está habituado a pasar tiempo fuera de la casa, podrá resistir el frío y dormir afuera durante el invierno. 

Eso sí, su propietario debe conocer las necesidades de su mascota y hacer ciertas cosas por él. Por ejemplo, si el gato está dispuesto a dormir fuera es recomendable que tenga un refugio cálido en el exterior protegido de la lluvia y el viento. También se recomienda instalar una gatera que le permita entrar si siente que en el exterior hace mucho frío.

Hay que tener presente que si un gato está acostumbrado a salir será difícil detenerlo aunque haga frío.

Por ello, la trampilla para entrar y salir es una buena opción. No obstante, si no fuese posible instalar una gatera; el cuidador deberá controlar que el gato no se quede afuera mucho tiempo y duerma al aire libre -sobre todo si hace demasiado frío y/o hiela o nieva-.

Finalmente, es imprescindible observar a diario si el gato tiene los ojos o la nariz humedecidos en exceso, ya que podría haber cogido un resfriado. En estos casos, la mejor opción es llevarlo al veterinario y seguir el tratamiento indicado por los profesionales de la clínica. 

¿Los gatos duermen más en invierno?

Todo depende de los condicionantes externos de la propia estación del año. Por ejemplo, en verano en algunos lugares de España hace mucho calor. Un gato que viva en una de esas zonas buscará los lugares más frescos para estar cómodo y descansar, y no siempre los encuentra. Además, el calor lo mantiene más despierto, con más sed, los insectos lo molestan... Condicionantes que llegan a interrumpir su sueño. 

Durante el invierno, es más sencillo encontrar un lugar cómodo y cálido donde descansar. Muchos optan por dormir sobre el suelo radiante, sobre el radiador o escondidos bajo una manta. Asimismo en la época invernal hay menos mosquitos, más tranquilidad y menos luz; características que incitan al gato a dormir plácidamente, sin distracciones y más tiempo. 👈

Por lo tanto; no importa que sea verano o invierno, el propietario del felino debe preparar buenos lugares para su mascota dentro de su casa en los cuales el gato no sufra alteraciones del sueño debido a la humedad o a un cambio brusco de temperatura. 

Gato arropado con mantas ©Shutterstock Ermolaeva Olga 84

¿Cuántas horas duerme un gato?

Todo depende de la edad del gato y de sus condiciones de vida: 

  • Un gato bebé o recién nacido, que reduce su actividad al mínino, puede llegar a dormir hasta 20 horas al día, dejando de hacerlo solo para alimentarse. 
  • Un gato adulto va reduciendo las horas de sueño poco a poco, llegando a dormir hasta 16 horas al día. 

¿Qué hacen los gatos cuando tienen frío en invierno?

Entre las estrategias más comunes para defenderse del frío, los gatos buscan fuentes de calor. Por ejemplo, cerca de radiadores o chimeneas, o tumbándose al sol. Aunque esa no es la única táctica felina para combatir la llegada del invierno: los gatos también buscan lugares mullidos y estrechos en los que puedan enroscarse, bajo una manta, dentro de una caja de cartón o en el interior de un armario. 

👉 Ejemplos prácticos para saber si tu gato está combatiendo el frío:

  • Tu gato está constantemente buscando un lugar cálido: junto al radiador, al lado de la chimenea, en una ventana en la que entre el sol...
  • Tu gato se mete en su cama o elige una caja para estar caliente.
  • Tu gato se enrosca en lugares estrechos o angostos para poder estar lo más calentito posible. La postura de dormir enroscado en forma de media luna y tapando su cabeza con las patas es ideal para protegerse del frío y del viento y preservar su calor corporal. 

A tener en cuenta 👉 En ocasiones los gatos se acercan tanto a las fuentes de calor que pueden sufrir quemaduras, muchas veces imperceptibles. Revisa a diario la zona del hocico y comprueba que tenga pelo y no esté irritada. Asimismo es recomendable, en caso de tener una chimenea, disponer de una pantalla que mantenga al felino alejado de chispas, cenizas y humo, para evitar tanto quemaduras como problemas respiratorios. 

¿Dónde se esconden los gatos cuando hace frío?

Además de los lugares expuestos sobre estas líneas, los gatos pueden buscar otros escondites, más específicos, para protegerse del frío: 

  • Tuberías y conductos de ventilación: el calor y la ausencia de intrusos los convierte en el escondite ideal para los gatos en invierno.
  • Radiadores y calefactores
  • Techos altos y tejados
  • Cajones y armarios 
  • Detrás de las cortinas
  • Librerías: los gatos pueden enrollarse hasta hacerse un ovillo y camuflarse en sus huecos. Además, si optan por un rincón alto; tendrán una vista privilegiada.
  • Electrodomésticos: cuidado al dejar abiertos los tambores de la lavadora o de la secadora de ropa. A los felinos les gusta resguardarse en todo tipo de cavidades, sobre todo en éstas si están repletas de ropa. Por lo tanto, antes de poner a funcionar la lavadora, vigila que tu gato no esté dentro. 
  • Motores del coche: Los gatos, especialmente los gatos callejeros, son muy perceptivos cuando se trata de encontrar cualquier sitio que les proporcione calor. Esta es la razón por la que podrías encontrar un felino escondido debajo de tu coche, en el motor, cerca del tubo de escape o sobre la rueda. En invierno, da unos golpes al capó antes de arrancar. Podrás salvar la vida de un gato. 
Este gesto salva vidas ©Wamiz

¿Qué temperatura soporta un gato en invierno?

Algunos gatos adultos y sanos, gracias a su pelaje -como los gatos siberianos-, pueden llegar a soportar temperaturas de hasta -20°C sin ningún problema. Sin embargo, si un felino está enfermo, es anciano o es un cachorro; su salud puede verse comprometida en invierno. Su propietario debe estar alerta de que no pase frío y se encuentre a gusto y cómodo.

¿Los gatos tienen frío en invierno?

Sí, los gatos tienen frío en invierno. A pesar de que su pelaje les ayuda a combatir las bajas temperaturas, a veces no es suficiente para mantener su temperatura corporal (sobre todo los 'callejeros' que no tienen un hogar donde refugiarse ni calentarse). 

¿A qué temperatura tiene frío un gato?

La zona de confort térmico (o neutralidad térmica) de los gatos oscila entre 30 y 38ºC. Por lo que se supone que un gato comienza a sentir frío a partir de los 29ºC en descenso. Esto significa que en invierno la temperatura de la mayoría de las casas y el exterior está por debajo de esta zona y pueden tener reacciones al frío. Sin hablar de la temperatura que hace en la calle. 

A partir de los 29º C en descenso, la mascota puede empezar a sentir frío y este va en aumento si la temperatura disminuye, especialmente en invierno, debido a la humedad o el viento.

El microclima de la habitación en la que se encuentra el gato también afecta los indicadores de su temperatura corporal. Si donde está hace frío, la temperatura de su cuerpo y de sus patas disminuirán.

Patas frías en gatos

En este punto cabe destacar que la temperatura del cuerpo del gato cambia durante el día, un fenómeno fisiológico normal. Además, los gatos domésticos presumen de almohadillas suaves y con buena sensibilidad. Por su parte, los 'callejeros' las tienen más gruesas; algo que provoca una baja susceptibilidad de las terminaciones nerviosas a la temperatura del aire exterior.

Los expertos de Pets Medical Center señalan que si comparamos los indicadores de la temperatura de las almohadillas con la temperatura del resto del cuerpo, se aprecia que son ligeramente más bajos. Aún así si un gato tiene las patas frías, su propietario debe estar alerta y vigilar muy de cerca a su mascota pues, en ocasiones, pueden revelar algún problema de salud o patología. 

Si la temperatura del gato disminuye, no solo de las patas, sino todo el cuerpo, hay que contactar con el veterinario

¿Por qué mi gato tiene las patas frías?

Las patas frías en un gato pueden indicar una situación de malestar, según los veterinarios: 

  • El gato está deshidratado. Si las patas del felino no se calientan con facilidad, esto puede ser un síntoma de deshidratación. 
  • El gato tiene frío. Si la temperatura ambiente es fría, algunas partes del cuerpo del gato se enfriarán más de lo habitual: sus patas, la punta de las orejas o el final de la cola son algunas de ellas. Este cambio en la temperatura de la superficie del gato es simplemente la consecuencia de disminución del flujo sanguíneo en las partes más periféricas y superficiales del cuerpo.
  • Hipertrofia cardiaca
  • Muerte. Lamentablemente, a un felino que está a punto de morir se le enfriarán las patas. Ese es el momento en que el corazón se debilita y la temperatura del gato comienza a bajar por debajo de 37,5 °C. 

Cabe destacar que las patas del gato son un termómetro natural. Un estudio japonés determinó que la temperatura de las patas puede revelar cómo está el felino. Basta con revisar las patas de tu mascota para saber ciertas cosas: por ejemplo, si están demasiado calientes; es probable que el felino tenga fiebre. 

Cómo proteger las patas de mi gato en invierno

La nieve, el hielo o la sal marina esparcida por la calle representan un serio peligro para las patas del gato, puesto que en su base se encuentran las almohadillas (suaves, carnosas y delicadas). Cierto es que el felino trata de mantenerlas hidratadas lamiéndolas a diario, pero en invierno (sobre todo si el animal tiende a salir a la calle) no es suficiente y puede sufrir grietas y/o cortes que le causen dolor. 

Por lo tanto, para ayudar al gato a proteger sus almohadillas puedes: 

  • Aplicar una crema hidratante para uso veterinario, ideal apra mantener la zona hidratada. Eso sí antes de comprarla y aplicársela al gato, consulta con el doctor. Éste te recomendará la mejor y te dirá cómo aplicarla para que el felino la acepte. 
  • Lavar con agua caliente (más bien tibia) y secar muy bien las patas. De esta manera se eliminan los residuos de nieve, hielo o sal presentes en sus almohadillas. 
La sal es particularmente peligrosa porque el felino, lamiéndose a sí mismo, podría ingerir los gránulos y sufrir problemas gastrointestinales.

La recomendación es revisar siempre las patas del gato cada vez que entre en casa. De esta manera, evitarás que se le formen fisuras en sus almohadillas durante el invierno. 

Gato lamiéndose sus patas debajo de una manta ©Shutterstock Marinka Buronka

¿Los gatos hibernan?

Los animales cambian sus hábitos y rutinas para adaptarse a las diferentes temperaturas. Un hecho que viene de la mano de la siguiente pregunta: ¿los gatos hibernan en invierno? 

Una cuestión ligada al hecho de que la mayoría de los gatos domésticos cambian su rutina cuando hace frío, llegando a dormir algunas horas más de lo habitual. No obstante, los expertos subrayan que la hibernación va más allá del dormir, los animales que hibernan experimentan cambios fisiológicos (entre los que destacan que su frecuencia cardíaca y respiratoria disminuye y la temperatura corporal llega a igualar, en algunos casos, la del ambiente). Además, un animal que hiberna es ajeno a su entorno, tiene una conciencia disminuida. Algo que no le ocurre a los gatos invierno. 

Los gatos domésticos no tienen necesidad de hibernar porque sus propietarios los cuidan, les proporcionan comida y disfrutan de una buena temperatura. Simplemente, cambian ciertas rutinas como les ocurre a los humanos. 
Gato durmiendo sobre el regazo de su dueña ©Shutterstock Alena Ozerova

Mi gato apático en invierno, ¿qué le pasa?

Esta pregunta viene de la mano de otra: ''por qué los gatos están menos activos durante el invierno''. Algunos propietarios creen que sus gatos hibernan por el mero hecho de tener menos actividad en la época invernal y dormir más. Estos ítems nada tienen que ver con hibernar, tal y como explicamos en el punto anterior, y tampoco deben ser motivo de preocupación para los dueños de los felinos.

En invierno, al igual que le ocurre a ciertos humanos, los gatos están más apáticos, más tranquilos, duermen más debido al frío y a la disminución de la luz, entre otros. 

Ante ese cambio de rutina, se recomienda a los dueños de los gatos que intenten involucrar a sus gatos en juegos para evitar la obesidad, el aburrimiento y mantenerlo activo. 

Sin embargo; si notas que tu felino experimenta un cambio de comportamiento brutal (se niega a comer, a beber, a moverse, tiene las patas gélidas...), llévalo inmediatamente al veterinario. 

¿Qué gatos son más sensibles al frío y a los cambios de temperatura?

Los gatos, tal y como venimos señalando a lo largo de este contenido, pueden sentir y pasar frío; al igual que los humanos. Aunque existen ciertos felinos más sensibles a los cambios de temperatura que otros:

  1. Gatos enfermos: suelen tener las defensas muy bajas y, por lo tanto; son más propensos a resfriarse en épocas de frío.
  2. Gatos mayores: los felinos mayores de 7 años son más propensos a sentir frío porque su sistema inmunológico ya ha comenzado a debilitarse con el paso del tiempo, según informaciones veterinarias vertidas en el portal Grupo Veterinario La Fortuna.
  3. Cachorros y recién nacidos: un gatito recién nacido necesita más protección que un gato adulto debido a que su sistema inmunológico aún no está desarrollado. 
  4. Gatos sin pelo: las razas sin pelo -o con muy poco- sienten mucho más el frío en invierno (pero también el resto del año). 

Los expertos recomiendan que los gatos recién nacidos, enfermos, mayores o sin pelo permanezcan en la medida de lo posible en el interior para evitar que sufran una hipotermia.

 

Cómo abrigar a un gato en invierno

En invierno, debido a la muda propia de los felinos, el pelaje de los gatos es mucho más denso. Esto les ayuda a mantenerse más calientes y a soportar mejor la bajada de las temperaturas. Sin embargo, algunos gatos siguen teniendo frío durante la época invernal. 

Además de mantener una buena temperatura en casa, proporcionarle un refugio cómodo y cálido y estar muy pendiente de él, algunos propietarios optan por ponerle ropa de invierno al gato

Algunos felinos aceptan estas prendas, pero a otros muchos no les gustan. Si tu felino forma parte del último grupo, existen otras maneras de abrigar a tu gato durante el invierno: 

  • Camas y mantas térmicas para gatos. Aquí puedes ver algunos ejemplos de Amazon. 
  • Subir las persianas y cerrar las ventanas para que tu gato pueda tomar el sol.
  • Nutrición equilibrada que ayude al gato a tener la suficiente energía durante el invierno. 
  • Camas para gatos y cajas de cartón. 
  • Poner la calefacción. 
  • Ropa para gatos.

¿Le puedo poner un jersey a mi gato?

Carlos, de Mascotas y Familias Felices, cuenta en este vídeo de YouTube cómo los gatos se enfrentan al frío de, por ejemplo, Madrid. El experto subraya de qué manera la ropa para gatos puede estresar al felino. Hasta el punto de decir que un simple jersey puede hacerle más bien que mal al animal. 

¿Los gatos engordan en invierno?

Al igual que les ocurre a algunos humanos, los gatos pueden coger unos kilos durante el invierno. Esto se debe a la apatía que ciertos felinos sufren debido a las bajas temperaturas y las pocas horas de luz que les incitan, entre otras cosas, a dormir plácidamente en el sofá. 

Dieta adecuada para los gatos en invierno

Durante esta estación, el propietario deberá seguir una dieta de calidad y vigilar que el felino está bien hidratado. 

Evita, sobre todo durante la época de las navidades, darle las sobras a tu gato.

Gato junto al árbol de Navidad ©Sharomka/Shutterstock
Recuerda: antes de cambiar la dieta de tu gato, consulta con tu veterinario

Dedicar tiempo a motivar y jugar con el gato también es clave para que no engorde y se encuentre activo.

En ocasiones y a pesar de las pautas seguidas por el propietario, el animal sube de peso. Si sientes que tu gato está apático y ha engordado demasiado en cuestión de semanas, visita a tu veterinario. 

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Comentarios
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1 comentario

  • Chani
    Chani
    "El experto subraya de qué manera la ropa para gatos puede estresar al felino. Hasta el punto de decir que un simple jersey puede hacerle más bien que mal al animal."

    Supongo que al final queríais decir lo contrario. Que puede hacerle más mal que bien.

    Saludos! :)
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