Los hechos ocurrieron en Texas, Estados Unidos. Allí un criador se encontraba desesperado porque nadie quería comprar a uno de sus perros, de raza pastor australiano, más especiales. El animal había perdido la vista en uno de sus ojos al nacer, y su cuidador estaba perdiendo la esperanza de encontrarle una familia a su altura.
Por suerte, una mujer se acercó a ellos dispuesta a cambiar el rumbo de la vida del perro.
Un comienzo difícil para el animal
La escena se produjo durante el periodo navideño, cuando los demás perros de la camada ya tenían un hogar. Al criador solo le quedaba por vender un cachorro tuerto, algo que le estaba costando más de lo que había imaginado.
Fue entonces cuando una mujer llamada Kendry lo vio y supo que tenía que llevárselo a casa. Kendry tenía un hermano, Jordan Trent, ciego de un ojo desde hacía muchos años (lo había perdido la vista cuando era adolescente) y pensó que ambos podían hacer ''buenas migas''.
Milagro pre-navideño
La mujer no se equivocó lo más mínimo. En cuanto llegó a casa de su hermano con el cachorro, comprobó que el perrito acababa de encontrar una nueva familia. Jordan y sus hijos se alegraron mucho cuando lo vieron y decidieron quedárselo.
El cachorro recibió el nombre de Shiner Solo: "Shiner" en honor a la cerveza tejana, mientras que "Solo" procede del personaje favorito de Jordan de la película Star Wars (Han Solo).
Han pasado varios años desde que el perro encontró una familia a su altura, y salta a la vista (si te das una vuelta por su cuenta de Instagram 👆👇) de lo feliz y contento que está.