A los perros, el hecho de tenerlos no todo el mundo lo entiende igual. En un extremo están las personas que los sienten como uno más de la familia; y al otro lado, quienes se deshacen con facilidad de ellos como si fueran un saco de basura.
Petra y Gunter son dos cachorros que, por desgracia, cayeron en este último grupo. Les encontraron hacia finales de mayo en mitad del monte, puede que incluso nacieran allí o les dejaran abandonados siendo muy bebés. Y puede que de ahí les venga su tremendo temor.
Solo tienen 3 meses de vida
En el vídeo de aquí abajo, compartido por Protectora de Animales SVPAP, Petra está medio tumbada en una cama, sin establecer contacto visual. Mira de reojo, desconfiada. Y el perro más clarito, Gunter, está aterrado, buscando refugio pegado a la pared.
"¿Qué les habrán hecho?", pregunta una persona en uno de los comentarios en Instagram. "Preferimos ni pensarlo", lamenta la asociación que se hace cargo de ellos. Solo tienen 3 meses de vida.
Tras dejarles unos días de recuperación, ahora Petra y Gunter están en adopción. "Necesitan una familia que les dé todo el amor, la tranquilidad y empezar por fin la vida que tanto merecen".
Y avisa la asociación, para que luego no vengan los de "el perro se hizo demasiado grande", sobre el tamaño de los cachorros: "Crecerán hasta los 20-25 kilos".
"Ahora viene lo bueno, bonitos, vuestra vida feliz está cerca", dice otra de las personas que comparte el vídeo inicial.
Ojalá encontréis familia pronto, vuestras heridas sanen y seáis felices.
Suerte, Petra y Gunter ❤️.
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