Reconocer a un perro con miedo
Lo primero es partir de la norma de que no siempre nos encontramos ante el caso de un perro con miedo y no todos los perros con miedo se comportan igual. Hay veces que el miedo se confunde con, por ejemplo, inseguridad o agresividad, y se trata de problemas muy diferentes que deben atenderse por medio de distintas vías. Además, las causas pueden ser varias: desde el miedo a otros perros, a los truenos, a ruidos, etc.
Como un perro demuestra el miedo tiene una variabilidad individual de cada uno enorme:
-
Algunos perros manifiestan el miedo como nosotros esperamos, huyendo de las personas, escondiéndose en cualquier rincón, con el rabo entre las piernas y acompañado de una mirada de puro pánico. No hay duda de que en este caso estamos ante un perro aterrorizado que necesita ayuda con urgencia.
-
Otros perros con miedo pueden reaccionar ladrando sin parar e incluso acompañarse de gruñidos que se pueden confundir con agresividad. Quizás un perro que ladra a las personas desconocidas que se acercan no quiera atacarlas sino más bien alejarlas y, utiliza el ladrido y/o gruñido como mecanismo de defensa.
-
Un perro con miedo puede buscar refugio en nosotros. En este caso, se trata de perros que buscan a sus dueños desesperadamente cuando se da esa situación desencadenante de miedo. Buscan que el propietario lo reconforte y proteja, sin embargo, en muchos casos esto deriva en una dependencia y agravamiento del miedo debido a nuestra forma de reaccionar.
-
Otra forma de demostrar el miedo puede ser un comportamiento agresivo. Esto suele ocurrir en perros maltratados o que han sufrido algún trauma durante su vida. Los perros con miedo que reaccionan con agresividad, no siempre significa que se trate de perros agresivos.
Si un perro tiene pánico a las personas, porque ha tenido malas experiencias en su vida, o miedo a los perros, porque ha sido atacado muchas veces, no enseña los dientes o muerde por demostrar su poder, sino porque está aterrado, le supera la situación y quiere alejar la fuente de miedo a toda costa.
Cómo NO actuar ante un perro con miedo: comportamientos a evitar
Lo más complicado es entender a qué tiene miedo el perro, y muchas veces puede ser necesaria la ayuda de un profesional (etólogo, adiestrador y/o educador canino) para poder confirmar que nos encontramos ante un caso de miedo y cuál es la fuente del problema.
Una vez sabemos qué provoca el miedo debemos saber cómo reaccionar y evitar muchos comportamientos que, aunque a nosotros nos parezca lo mejor o más razonable, el perro no los entiende de la misma manera.
1. Mano dura
A un perro con miedo le falta confianza en sí mismo, y si nuestra respuesta ante el miedo es un golpe o cachete que también lo aterrorice, estaremos ante un bucle de frustración y llevando al perro a un pozo sin fondo que él no es capaz de superar sólo.
2. Gritos
Un perro con miedo suele ser un animal muy sensible a estímulos. Necesita recibir calma y seguridad por tu parte, por lo que los gritos pueden desestabilizarlo todavía más.
3. Castigarlos en una habitación
Un perro no puede hacer un examen de conciencia. Si ha sufrido un episodio de miedo y nuestra reacción es dejarlo solo, lo único que estaremos consiguiendo es alargar y agravar esa situación de estrés.
4. Sobreestimulación
Con esto nos referimos, por ejemplo, si un perro tiene miedo a los ruidos fuertes, la solución no está en llevarlo a un concierto para que se acostumbre. O si tiene miedo a las personas desconocidas, no es aconsejable que todo el mundo se acerque a tocarlo, ya que se sentirá superado por la situación.
Cómo actuar ante un perro con miedo
Ya sabemos qué es lo que no debemos hacer, ahora vamos con lo que sí puede poner solución al problema. En estos casos, recomendamos la ayuda de un profesional para escoger las estrategias indicadas para tu compañero peludo.
Paseos diarios
Si las condiciones del perro lo permiten, un buen paseo donde desgaste energía, va a liberar a nuestro perro de mucha frustración y será más fácil alcanzar la calma.
Refuerzo positivo
En lugar de alentar el mal comportamiento con nuestra atención, debemos premiar cuando lo haga bien.
Por ejemplo, si estamos ante un perro que ladra a las personas desconocidas por miedo y, de entre 10 que nos cruzamos durante el paseo, hay con una persona que no lo hace, debemos premiar y celebrar ese comportamiento. Poco a poco verá lo positivo de la gente extraña, ¡una golosina!
Para profundizar más en el tema te recomendamos que leas el artículo '¿Cómo educar a mi perro? Las claves del refuerzo positivo'.
Calma y tranquilidad
Como hemos dicho, un perro con miedo suele ser un perro sensible por lo que necesita un ambiente estable y de paz donde poder relajarse.
Ignorar ante un episodio de pánico
Si nuestro perro sufre un momento de pánico donde nos busca para sentirse protegido, lo mejor es ignorar totalmente ese comportamiento. No debemos tener contacto físico ni visual para evitar reconfortar ese comportamiento.
Exposición gradual
Si es necesario y queremos que supere sus miedos, la exposición al problema debe ser muy progresiva y debe predominar la paciencia.
Estas son algunas herramientas que te pueden ayudar a la hora de actuar ante un perro con miedo, no obstante, siempre es recomendable estar aconsejado por un educador canino y/o etólogo que sabrá profundizar en el origen del problema. Recuerda, lo más importante es tratar de entender a nuestro perro e inundarnos de la calma y paciencia que necesita.