Los perros de la foto son Mandy y Mambo. Llegaron cuando tan solo eran unos cachorros al refugio de Oubliés de Saint Béart, situado al sur de Francia, en Montauban. Inseparables, tardaron cuatro años en encontrar una familia adoptiva.
Los perros, aparentemente cruce de dálmata, por fin vivían bajo el calor de un hogar y eran los más felices del mundo. Sin embargo, la mala suerte volvió a aparecer. 5 años después de su adopción, la señora que era su familia enfermó.
Contactó con el refugio de donde los sacó para que se hiciera cargo de ellos. Mandy y Mambo están confusos, no entiende qué ocurrió para volver de nuevo al lugar de origen y, por el momento, parece que vuelven ser invisibles para los visitantes.
Adopción conjunta
Los dos perros siempre compartieron vida y por ello el refugio sigue trabajando para dar con una adopción conjunta, es decir, una familia que les adopte a ambos. Y aunque eso pueda resultar más complicado, el carácter de ambos te hará olvidar que son dos.
Mandy y Mambo se llevan bien con todos y son muy sociales. Ahora tienen 9 años y medio y solo necesitan un rincón acogedor para disfrutar de la comodidad. Son aptos para compartir su techo con otros perros y gatos y serán unos compañeros muy agradables.
Bondad y gentileza son las dos palabras que los describen a la perfección. Merecen más que nadie romper esta maldición encontrando una familia que esta vez pueda tenerlos hasta el final.
Si quieres más información sobre ellos, encontrarás todos los datos de contacto en la página de Facebook del refugio (pulsa aquí).
Mucha suerte, Mandy y Mambo❤️.