El pasado sábado 13 de julio, el mundo se enteraba con tristeza del fallecimiento de Shannen Doherty a la edad de 53 años.
La actriz, conocida por series como Sensación de vivir, La casa de la pradera o Embrujadas, llevaba luchando contra el cáncer desde 2015.
Rodeada de los suyos y de su perro
En cuidados paliativos desde hacía varias semanas, la actriz falleció pacíficamente rodeada de su familia y su perro, Bowie.
Según contó la actriz estadounidense, la pastora alemana, a la que estaba muy unida, tuvo el mérito de detectarle el cáncer antes que nadie:
"Ella estuvo olfateando obsesivamente en mi lado derecho durante mucho tiempo antes de que me diagnosticaran el cáncer", dijo la estrella en una entrevista con Entertainment Weekly en 2016. "Así que todo cobró sentido cuando me confirmaron la noticia."
Bowie, que fue un regalo de su ex Kurt Iswarienko, ocupó un lugar muy importante en la vida de la intérprete.
"Te quiero de una forma obsesiva"
Unas semanas antes de su muerte, Shannen publicó una foto deseándole feliz cumpleaños a su perrita: "Feliz cumpleaños al mejor perro del mundo. Te quiero de una forma obsesiva". De hecho, la actriz le dedicaba al animal muchas de sus publicaciones.
Durante uno de sus pódcast en enero de 2024, Shannen compartió que quería que sus cenizas se mezclaran con las de su perro y las de su padre.
Más tarde, añadiría que no quería ser enterrada ni incinerada y que le interesaba "la idea de que sus cenizas se utilizaran para hacer crecer un árbol".
Sea como sea, seguro que ha dejado un gran vacío en la vida de Bowie. D.E.P., Shannen, ¡y gracias por tanto!
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