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mi perro no bebe agua
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Mi perro no bebe agua, ¿por qué?

Por Maica Bosch Periodista

Actualizado el

¡Mi perro no bebe agua! Si estás preocupado por la hidratación de tu perro, lo primero es comprender las razones que llevan a un perro a dejar de beber.

Pueden ser muchas las causas que provoquen el rechazo a beber en tu perro.

Dentro de las más frecuentes, algunas son patológicas (que implican una enfermedad), o no patológicas.

Si tu perro no bebe agua, es importante saber diferenciar entre unas y otras causas, para poder poner solución al problema.

Visita a tu veterinario ante cualquier duda.

Mi perro no bebe agua: razones

Si ya estás desesperado y te preguntas ¿por qué mi perro no quiere tomar agua?, has de saber que el consumo de agua de un perro depende de varios factores. Entre ellos:

En vídeo:
  • la alimentación
  • el ambiente
  • su nivel de actividad

En efecto, la cantidad de comida y los nutrientes que contiene la dieta pueden hacer que un perro quiera tomar más agua.

Los estudios en perros han mostrado que beben más agua después de comer, especialmente si se les da una ración más grande o comida rica en carbohidratos.

La cantidad de agua que toman también cambia según el nivel de humedad de su comida. Si la comida tiene más agua, tienden a beber menos.

Además, si hace mucho calor o la mascota es muy activa, como los perros de trabajo, beberán más agua para reponer lo que pierden por el esfuerzo o el clima.

Enfermedades por las que mi perro no bebe agua

  • Enfermedad dental. Un problema en la región de la boca puede provocar mucho dolor y con ello, que el animal no quiera beber. La afección puede estar a nivel de los dientes, en la encía, sensibilización en algún nervio dental e incluso, a nivel de los músculos maseteros. 
  • Enfermedad vírica. Algunas enfermedades como el moquillo (distemper canino) o la rabia eliminan la sensación de sed en el animal. Además de dejar de beber se observarán otros síntomas que, sumados al anterior, provocarán una debilitación exagerada del perro. Se trata de un motivo urgente que precisa atención veterinaria. 
  • Estrés. Bajo una situación que genere estrés en tu perro, puede cambiar sus prioridades. Puede haber un problema de comportamiento de base, como por ejemplo la ansiedad por separación, que cause mucha angustia en el animal y, por tanto, pierde el interés por beber ya que su única preocupación es que vuelvas a casa. También cambios de rutina como mudanzas, miembros nuevos en la familia, ruidos, etc., pueden desencadenarlo. 

Otras causas por las que mi perro no bebe agua

  • Edad. Quizás esta sea una de las razones más frecuentes. La disminución de la ingesta de agua puede ser un riesgo en perros mayores, que suelen estar menos dispuestos a beber. Esto se asocia a la inactividad que presentan, son sedentarios y no ejercitan por lo que no tienen necesidad de ir a beber. Aunque ellos pueden sentirlo así, no es la realidad y todo perro, sea de la edad que sea, necesita beber una cantidad de agua suficiente para un buen funcionamiento del organismo. 
  • Frío. El frío puede reducir la sensación de sed en el perro, todo lo contrario a cuando sienten calor, que sienten la necesidad imperativa de hidratarse. 
  • Pocas ocasiones para orinar. Los perros tienen gran capacidad de asociación, además de recordar perfectamente la rutina. Esto se traduce en que, si él sabe que va a tardar mucho en salir a pasear, evitará beber para no tener que aguantarse la orina. Este factor nos afecta directamente ya que depende de nosotros, por lo que si te preguntas “¿por qué mi perro no bebe agua?” revisa la frecuencia de los paseos. 
  • Concentración en otras tareas: Los perros de trabajo muy activos pueden no satisfacer sus necesidades de agua 
    si su adiestrador o propietario no les anima específicamente a beber.
  • Falta de acceso al agua: También puede haber riesgo de bajo consumo de agua  si no se proporciona al perro acceso a agua fresca, o si está al aire libre en climas fríos donde el agua puede congelarse.

Mi perro no come ni bebe: ¿qué hago?

Si un perro no bebe agua y, además no quiere comer, se trata de un problema serio.

Debemos actuar rápido ya que los perros se pueden descompensar muy rápido y la deshidratación, sumada a un estómago vacío y falta de nutrientes, bajará las defensas y hará que el perro se encuentre muy débil.

Algunas posibles causas incluyen:

  • Problemas digestivos: Puede tener malestar estomacal, náuseas, o algún bloqueo en el sistema digestivo.
  • Dolor o molestias físicas: El dolor dental, lesiones o enfermedades en otras partes del cuerpo pueden hacer que pierda el interés por comer o beber.
  • Enfermedades: Infecciones, enfermedades renales, hepáticas, o incluso problemas cardíacos pueden afectar su apetito y consumo de agua.
  • Estrés o cambios en su entorno: Situaciones nuevas, como una mudanza, la llegada de otro animal o cambios en su rutina, pueden causarle estrés y hacer que no coma.
  • Reacciones a medicamentos: Si está tomando algún medicamento, podría estar sufriendo efectos secundarios que afectan su apetito.

Es recomendable llevar al perro al veterinario lo antes posible para identificar la causa y recibir el tratamiento adecuado. Mientras tanto, trata de mantenerlo hidratado ofreciéndole agua con una jeringa (sin aguja) o probando con alimentos húmedos o caldos sin sal para estimularlo a beber y comer.

Cómo saber si mi perro está hidratado

Lo principal, antes de asustarnos, es saber reconocer si nuestro perro está hidratado. Puede estar bebiendo sin que nosotros lo veamos.

Estos son algunos trucos para saberlo:

  • Revisar las encías: Las encías de un perro hidratado deben ser de color rosa y húmedas. Si están secas o de un color más oscuro (como blanco o amarillo), puede ser señal de deshidratación.
  • Prueba del pliegue de piel: Tira suavemente de la piel en la parte posterior del cuello o entre los omóplatos. Si la piel regresa rápidamente a su lugar, está bien hidratado. Si se queda en su lugar o regresa lentamente, puede estar deshidratado.
  • Observa el comportamiento: Los perros bien hidratados suelen estar activos y enérgicos. Si tu perro está letárgico o muestra menos interés en jugar, puede necesitar más agua.
  • Frecuencia de orina: Un perro bien hidratado orina con regularidad y la orina suele ser de color claro. Si su orina es oscura o si está orinando menos de lo normal, puede estar deshidratado.
  • Verifica el apetito: Aunque no siempre es un indicador, si tu perro tiene un buen apetito y está comiendo bien, es posible que esté bien hidratado, especialmente si consume comida húmeda.
  • Temperatura corporal: Si tu perro se siente caliente al tacto o tiene una temperatura elevada, puede ser un signo de deshidratación.

En este vídeo, un veterinario explica cuánto tiempo puede estar un perro sin beber agua ni deshidratarse:

Cómo hacer que mi perro beba agua

De nuevo debes recordar que, si tu perro no bebe agua, puede ser secundario a un problema mayor. A continuación, mencionamos algunos trucos para estimular la sed que pueden ser de ayuda:

  • El bebedero debe tener agua limpia y fresca siempre.
  • Coloca el bebedero en una zona de fácil acceso.
  • Coloca varios bebederos por la casa, para que él pueda elegir el lugar.
  • Durante los paseos haz descansos y ofrécele agua.
  • Si continúa rechazando el agua, pero tiene apetito, humedece el pienso con caldo sin sal o agua para aportarle cierta hidratación. También sería una buena idea alimentarlo con comida húmeda (latas) durante el periodo que no quiera beber.

La deshidratación puede jugar una mala pasada en el bienestar de tu perro por lo que, si no bebe agua, no esperes demasiado para acudir al veterinario ya que puede derivar en un problema mucho mayor. 

  • Purina Institute. Hydratation in Pets: Strategies To Manage Water Balance In Cats And Dogs. Recuperado en: https://www.purinainstitute.com/sites/default/files/2021-04/purina-institute-monograph-hydration.pdf
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