En Wamiz estamos seguros de que en alguna ocasión has escuchado la frase de “la curiosidad mató al gato” y lo cierto es que, los que hemos convivido con un minino sabemos que encierra mucha más verdad de lo que nos gustaría.
Los gatos pueden meterse en los lugares más recónditos -en ocasiones no pueden o no saben salir de ellos-; acercarse a objetos realmente peligrosos para ellos, poniendo en riesgo su salud y a prueba el corazón de su amo, o hasta probar e ingerir alimentos o líquidos que no son apropiados para su organismo como productos de limpieza.
Centrandonos en la limpieza y los gatos, descubre qué productos tóxicos tenemos en nuestra casa sin darnos cuenta y cuáles son productos de limpieza seguros para gatos. Mira además, los mejores consejos para evitar accidentes.
Productos de limpieza seguros para gatos
Existen productos de limpieza seguros para gatos, pero hay que saber que incluso los productos etiquetados como "seguros para mascotas" deben usarse con precaución.
Siempre hay que verificar las etiquetas y seguir las instrucciones del fabricante.
Algunos productos de limpieza seguros para gatos son:
- Vinagre blanco diluido en agua (1 parte de vinagre blanco por 2 partes de agua). Es ideal para limpiar pisos, cristales, superficies de cocina y baños.
- Bicarbonato de sodio. Es excelente para limpiar alfombras, tapicería y para limpieza general.
- Jabones artesanales o naturales. Diluidos en agua se pueden usar como limpiador suave de pisos y superficies.
- Productos etiquetados como seguros para mascotas: algunas marcas ofrecen limpiadores diseñados específicamente para hogares con mascotas. Hay que leer las etiquetas y buscar productos sin amonios cuaternarios, fenoles, lejía o aceites esenciales tóxicos para gatos.
Productos de limpieza tóxicos
Los principales productos de limpieza tóxicos para gatos son los siguientes:
- suavizante de ropa
- detergente
- friegasuelos
- sprays
- lejía
Veamos a detalle los riesgos de cada uno.
Aunque el suavizante y el detergente de la ropa no ejercen una gran atracción sobre los gatos (como la lejía), sí que pueden ser muy peligrosos. Si un gato los ingiere, pueden provocarle úlceras en la boca y fuertes vómitos.
El friegasuelos es uno de los productos a los que el gato suele tener más acceso.
Muchos friegasuelos pueden ser tóxicos para los gatos debido a los ingredientes químicos que contienen, como amoníaco, fenoles, lejía, aceites esenciales, alcohol y otros compuestos agresivos.
Lo mejor es usarlo cuando vayamos a fregar y, cuando hayamos terminado, se debe vaciar el cubo totalmente y aclararlo, para que no queden restos del mismo.
Los sprays, aunque su líquido no pueda ser ingerido directamente por el gato, sí que pueden suponer un peligro si el animal respira gran cantidad después de haber sido aplicado en alguna habitación.
Por eso hay que utilizarlos en habitaciones en las que la ventilación sea idónea. De esta manera evitaremos que el gato pueda sufrir algún problema respiratorio.
¿El Sanytol es tóxico para los gatos?
El Sanytol no es uno de los productos de limpieza seguros para gatos. Este útil producto de limpieza puede ser tóxico, ya que contiene ingredientes desinfectantes y aceites esenciales, que pueden ser peligrosos para ellos.
Los gatos son especialmente sensibles a los productos químicos, y la toxicidad puede ocurrir por:
- Inhalación de vapores durante o después de la limpieza.
- Contacto con superficies húmedas o residuos del producto.
- Ingestión indirecta al lamerse las patas tras caminar sobre áreas tratadas.
Cómo usar Sanytol de forma segura
- Asegurarse de que la habitación está bien aireada durante y después de usar el producto.
- No permitir que rl gato entre en contacto con superficies recién desinfectadas hasta que estén completamente secas y hayan sido enjuagadas si es posible.
- No abusar del producto y seguir las instrucciones de dilución indicadas en la etiqueta.
- Enjuagar las áreas tratadas si el gato camina por ellas regularmente.
- Usar productos específicos para hogares con mascotas o soluciones naturales.
Qué hacer si un gato se intoxica con Sanytol
Si se detectan los síntomas comunes de intoxicación como babeo excesivo, vómitos, letargo o irritación en la piel, estornudos o dificultad para respirar, hay que actuar rápido.
Lo primero será lavar cualquier área del cuerpo que haya estado en contacto con el producto con agua tibia y llamar al veterinario, para que dé instrucciones precisas y reciba al gato en su consultorio lo más pronto posible.
Es buena idea llevar la información del producto (como la etiqueta) para facilitar el diagnóstico.
Intoxicación por lejía en gatos
La lejía merece un apartado especial entre los productos de limpieza peligrosos para gatos.
No por el hecho de ser uno de los más peligrosos para el organismo del animal, sino porque además ejerce una poderosa atracción sobre él.
Los gatos se sienten tremendamente atraídos por la lejía y lo demuestran rozándose contra los lugares que hayan sido limpiados con ella.
Por eso debemos evitar que tenga acceso a la misma, pues podría llegar a beberla. Esto, evidentemente, supone un riesgo de muerte por envenenamiento.
Síntomas de la intoxicación por lejía en gatos
- Babeo excesivo.
- Arcadas o vómitos (a veces con sangre).
- Dificultad para respirar.
- Irritación en los ojos o secreción ocular.
- Letargo.
- Desorientación o temblores.
- Convulsiones (en casos graves).
- Irritación o enrojecimiento de la piel (en caso de contacto directo).
Qué hacer en caso de intoxicación por lejía en gatos
Lo primero es actuar rápidamente, pero siempre conservando la calma.
Si hubo contacto con la piel o los ojos:
- Enjuagar la zona afectada con abundante agua tibia durante varios minutos. Hay que hacerlo con mucha delicadeza para evitar que el gato se asuste o se lastime más.
Si el gato ingirió la lejía:
- No inducir el vómito. Puede empeorar el daño al esófago y a la boca.
- Darle a beber agua o leche en pequeñas cantidades para diluir la lejía en el sistema digestivo. Esto solo debe hacerse si el gato está consciente y puede tragar.
En cualquier caso, hay que consultar a un veterinario inmediatamente y evitar tratamientos caseros sin guía profesional.
En este vídeo, un veterinario habla sobre las opciones para evitar el uso de lejía en las casas donde viven gatos:
¿Cómo limpiar la casa cuando hay gatos?
Para prevenir cualquier tipo de emergencia con tu gato antes, durante y después de haber limpiado tu hogar se puede hacer lo siguiente:
- Mantén siempre los productos de limpieza perfectamente cerrados con sus tapones originales y siempre en sus botes. Cambiar los productos de una botella a otra puede provocar pérdidas de líquido a las que podría tener acceso nuestro gato.
- Guarda siempre todas las botellas y los productos en un armario que quedé totalmente cerrado. Asegúrate de que tu gato no puede meter la pata por el hueco de la puerta para abrirlo. Eso es fundamental porque en caso contrario puede correr un grave peligro. Como ya te hemos dicho, su curiosidad puede hacer que hagan cosas realmente sorprendentes.
- Cuando vayas a utilizarlos, puedes intentar, en la medida de lo posible, separar al gato en otra estancia de la casa hasta que hayas terminado. De esta manera te permitirá hacerlo con más facilidad y al mismo tiempo minimizarás los riesgos.
Recuerda que si en algún momento te ves en una situación peligrosa porque tu gato ha ingerido algún tipo de producto químico de limpieza, corre al veterinario y lleva contigo la botella o hazle una foto a la etiqueta para que los profesionales sepan a qué se enfrentan y puedan administrarle el tratamiento adecuado.
Estas ingestas pueden resultar fatales para los gatos si no se actúa con rapidez y contando con la mayor cantidad de información posible.
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