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Gato bebe desnutrido

Cómo tratar a un gato bebé desnutrido

© Shutterstock

Tengo un gato bebé desnutrido: ¿qué debo hacer?

Por Sindy Bustamante Redactora

Actualizado el

Es posible que acabes de rescatar a un gatito callejero que se ha quedado huérfano recientemente, o que hayáis adoptado un gatito muy jovencito de una tienda o de un particular.

Esta separación de la madre tan temprana, además que implicar una serie de problemas de conducta a largo plazo, es muy probable que conlleve problemas de alimentación que pueden hacer que el gato bebé esté desnutrido y que le cueste comer.

Un gato bebé desnutrido es un verdadero problema, a que se encuentra en una fase de crecimiento y la buena alimentación es esencial. Si tu gato recién adoptado no come te arriesgas a perderlo, además de que esto le generará otros problemas y molestias.

Existen una serie de síntomas que diagnostican la desnutrición, pero aun así también es recomendable llevar al pequeño felino al veterinario para hacer una revisión completa.

Síntomas de la desnutrición en gatos

Es muy importante detectar si tu gato está realmente desnutrido o por el contrario sufre otra enfermedad o está perfectamente. Para ello es muy útil observar si se dan los siguientes síntomas propios de una falta severa de nutrientes en el gato:

  1. Piel seca y escamosa.
  2. Se mueve con poca energía, fatiga.
  3. Diarrea y vómitos.
  4. Mal estado general del pelaje (falta de acicalamiento).
  5. Delgadez extrema.
  6. Convulsiones.

Consejos para tratar a un gato bebé desnutrido

Es importante plantear bien la futura nutrición del felino, con una cantidad de nutrientes equilibrada que no servirá simplemente forzarlo a comer. Nosotros te explicamos qué debes de hacer en estos casos.

1. Llevarlo al veterinario

Nunca habrá una mejor respuesta ante cualquier problema de salud de una mascota que llevarlo al especialista. Da igual cuantas vueltas des por internet: nadie puede darte la solución a tu problema si ni siquiera puede ver el estado real de tu mascota.

Igual parece que tu gatito está sólo desnutrido, pero un veterinario puede detectar problemas graves de salud que le estén causando como síntoma todo lo que podría parecer desnutrición. Y también es muy posible que la propia desnutrición cause otros problemas por ejemplo del corazón o de vista.

Puede haber sólo una necesidad de cierta vitamina, fácilmente detectable por un veterinario, que no estamos cubriendo correctamente. El tiempo jugará en tu contra.

Es tan importante la nutrición para cualquier ser vivo, sobre todo en un momento tan crítico como la infancia, que debería quedar fuera de duda ir primero a por la opción más definitiva.

Una visita, a tiempo, al veterinario ¡puede salvar la vida de tu gatito!

2. Alimentarlo bien

Entre que recoges al gatito y lo llevas al veterinario puede pasar un tiempo. Y necesitas saber qué hacer mientras tanto.

Un cachorro de gato debe ganar peso cada día para desarrollarse bien. Todo lo que coma ahora le repercutirá en su constitución y en lo capaz que será en el futuro de enfrentarse a los problemas que le deparan. Incluso sus propias defensas inmunológicas.

Si el gato tiene menos de 45 días sólo deberás darle leche de gata. La leche materna está pensada para proporcionarle al gatito todo lo que necesita.

Siempre puedes comprarle leche de gata en polvo, o preparada, aunque no sea lo ideal (sobretodo, ni se te ocurra darle otro tipo de leche, ya que no tendría la proporción adecuada de grasas).

Obviamente, esa leche se la deberías de dar con biberón, procurando simular al máximo la teta de una madre gata. Así facilitaremos que el gatito huérfano exprese al máximo su conducta natural, la de mamar.

Si estamos hablando de un gato bebé desnutrido tendremos que vigilar que la alimentación sea muy paulatina. El estómago no estará acostumbrado a contener mucho alimento y podría haber problemas para digerir toda la leche.

Algunos especialistas también recomiendan administrar complementos vitamínicos. Todo dependerá de las necesidades concretas de cada caso. Pero para esto es mejor consultar con un nutricionista veterinario.

Señales de que el gato se recupera

Desde las primeras semanas puede que el gato bebé empiece a experimentar algunas mejoras.

Si vemos que el gatito empieza a jugar con nosotros en cualquier momento del día, esta será una señal de que empieza a encontrarse mejor.

También deberemos tener en cuenta sus reacciones cuando le demos de comer cualquier cosa, ya que a veces los gatos desnutridos rechazan la comida al principio pero cuando empiezan a recuperarse vuelven a tener apetito.

Si lo has alimentado bien, es posible también que se reduzcan las diarreas y vómitos. Aunque al principio no te asustes si aumentan, tu no dejes de alimentarlo.

Con los propios nutrientes, el gato luchará por sobrevivir, y salir de esta mala racha en la que lo has conocido. Piensa que estás salvandole la vida a tu futuro gato, y eso te lo agradecerá de por vida.

Es muy importante visitar el veterinario con frecuencia para asegurarte de que realmente hay una recuperación o si hay alguna cosa que se os pasó por alto y hay que tratar.

Por ejemplo: si el gato siguiera teniendo diarreas mientras se encuentra mejor, podría tratarse de un problema de parásitos. Algo que no esperabas pero que es una posibilidad si viene de la calle.

Te recomendamos tener mucha paciencia con el gatito, y a seguir dándole de comer para salvarlo pase lo que pase.

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