A pesar de su domesticación desde el año 5300 a.C., los gatos no han perdido su instinto de caza, lo que les lleva a muchos de ellos a atrapar diversas presas y traerlas a casa cuando tienen la oportunidad.
Pero, ¿qué pasa si mi gato se come una lagartija?
¿Qué pasa si mi gato se come una lagartija?
En principio, no tiene por qué pasar absolutamente nada.
Sin embargo, si un gato come demasiadas lagartijas, podría sufrir trastornos gastrointestinales, como vómitos, diarrea y pérdida de peso.
Estos efectos son pasajeros y, además, no es habitual que un gato se coma varias lagartijas de una vez.
¿Por qué mi gato me trae lagartijas?
Tu gato te trae lagartijas u otras presas debido a su instinto cazador innato. Para él, es una forma de colaborar con su "manada" y de mostrar sus habilidades.
Así pues, perseguir y cazar animales forma parte de su instinto para dominar su territorio.
¿Las lagartijas son venenosas para los gatos?
En general, la ingesta de lagartijas por parte de los gatos no es perjudicial.
Normalmente, los gatos, como depredadores, suelen ser capaces de evaluar el estado de salud de su presa y evitar comerla si perciben algún riesgo.
¿Qué pasa si mi gato se come una lagartija y se encuentra mal?
Como con cualquier otro alimento o planta, has de saber que cada gato es un mundo, y son numerosos los factores que pueden provocar malestar o intoxicación en gatos, incluso si el alimento ingerido es en principio seguro para el animal.
Ante signos de malestar aparentes, acude a tu clínica veterinaria para que un profesional examine a tu felino rápidamente y te prescriba el tratamiento más adecuado.
Otras presas que puede traer tu gato
El tipo de presas que un gato puede cazar es amplio y depende de la fauna local. Lógicamente, resulta casi imposible que tu gato te traiga un pingüino bebé a casa, por ejemplo.
Muchas de estas presas son también consideradas molestas por los humanos en sus hogares, lo cual no parece una coincidencia. Y tu gato, ¿es de los que te trae presas a casa?