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cómo saber si mi gato está enfadado conmigo

Toma nota de algunas cositas... Y deja de hacerlas.

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Cómo saber si mi gato está enfadado conmigo

Por Yanira Rodríguez Auxiliar veterinario

Publicado el

¿Cómo saber si mi gato está enfadado conmigo? Estas claves de su comportamiento lo revelan.

Los gatos pueden enfadarse, aunque sus emociones no son exactamente iguales a las humanas.

Cuando un gato está molesto, suele mostrar comportamientos como gruñir, bufar, arañar, o evitar el contacto.

El enfado en los gatos suele estar relacionado con sentirse incómodos, estresados o asustados. También pueden frustrarse por cambios en su entorno, como la llegada de otro animal, ruidos fuertes, o manipulación excesiva.

Aunque no guardan rencor como los humanos, necesitan tiempo y espacio para calmarse.

¿Y cómo saber cuándo darles ese espacio? ¿Cómo saber si mi gato está enfadado conmigo?

¿Los gatos se enfadan?

Los gatos pueden enfadarse o frustrarse por varias razones. Algunas de ellas pueden ser:

En vídeo:
  • Sentirse invadidos: Si se les toca demasiado o en lugares donde no les gusta, como la barriga.
  • Ruidos fuertes o cambios en el entorno: Mudanzas, remodelaciones o la llegada de nuevos animales o nuevos miembros de la familia pueden estresar a los gatos.
  • Falta de estimulación: Gatos aburridos o sin suficiente juego pueden mostrar frustración.
  • Territorialidad: La llegada de otro animal puede causar irritación.
  • Dolor o malestar: Un gato enfermo o con dolor puede volverse más irritable.

Es importante identificar la causa para calmar al gato.

Cómo saber si mi gato está enfadado conmigo

Para detectar cuando un gato está enfadado, lo más eficaz es observar su lenguaje corporal.

El gesto  más conocido para saber que el felino está enfado es el bufido. Aunque hay algunos más, que se enlistan a continuación y que debes tomar en cuenta si te preguntas cómo saber si mi gato está enfadado conmigo.

1. Gruñidos

Los ronroneos y los gruñidos no son los mismo y debemos aprender a diferenciarlos, porque esos dos gestos dicen dos cosas que son totalmente opuestas.

Si acariciamos a nuestro gato y nos gruñe es mejor que le dejemos estar solo un rato hasta que sea él el que venga hacia nosotras.

2. Pone las orejas hacia atrás

Esto puede significar, o que tiene miedo, o que hay algo en el ambiente que no le gusta.

Puede ser que nuestros mimos le estén molestando o que está enfadado y, ante nuestra insistencia para que nos perdone, se enfada todavía más.

Una vez más, la opción más inteligente es dejar al animal tranquilo hasta que se le pase.

3. Muestra los dientes

Al gruñir, un gato puede enseñar los dientes o no, en función del grado de enfado que haya alcanzado.

Si nos los muestra debemos andar con cuidado. Será imposible intentar calmarlo y lo mejor es darle su espacio y esperar a que esté más tranquilo, para evitar cualquier riesgo.

4. Ignora a las personas

Un gato enfadado puede ignorar a la gente como una forma de expresar su disgusto o malestar.

Este comportamiento de "ignorar" puede significar que el gato se aleja, evita el contacto visual o no responde cuando lo llaman o intentan interactuar con él.

Es una manera sutil de mostrar que necesita espacio o que no quiere interacción en ese momento.

Además, este distanciamiento puede deberse al estrés, la incomodidad o incluso al miedo, por lo que es importante respetar su espacio hasta que se sienta más cómodo.

Eso sí, es importante observar al gato para descartar otras causas subyacentes, como enfermedades, que puedan requerir atención veterinaria.

Cómo calmar a un gato enfadado

Si ya identificaste cómo saber si mi gato está enfadado conmigo, puedes pasar a la siguiente fase, que es contentarlo.

Para ayudar a un gato enfadado a calmarse, es muy útil proporcionarle un lugar tranquilo donde se sienta protegido.

Un entorno acogedor con juguetes, una cama cómoda y su caja de arena puede hacer que se relaje.

Los difusores de feromonas también son una opción, ya que imitan los químicos naturales que les ayudan a reducir su ansiedad.

Recompensar conductas positivas mediante golosinas o caricias refuerza actitudes calmadas.

Adicionalmente, sonidos suaves como música clásica o ruido blanco, y técnicas de masaje pueden tranquilizarlo.

Si el problema persiste, es recomendable acudir a un veterinario para evaluar posibles causas subyacentes.

En este vídeo, el veterinario M. Manzano abunda en este tema y da consejos pertinentes para calmar a un gato enfadado:

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