Todo el que tiene un animal sabe lo difícil que puede ser traer otro miembro a casa.
Ya sean perros o gatitos, el proceso de adaptación de un nuevo miembro en la familia suele ser difícil, y más aún cuando pretendemos que animales de diferentes especies convivan en nuestro hogar.
Nuevo integrante llega a la familia
A través de redes sociales pudimos conocer a principios de verano la historia de Beck: un perro consentido que tuvo que aceptar la llegada de un joven gatito.
El primer encuentro entre Beck y Bleu fue difícil para ambos. Al principio, la familia todavía tenía que dejar al gatito en el transportín para que el perro pudiera acostumbrarse a su presencia y olor.
Poco a poco, dejaron salir a la pequeña gatita bajo supervisión. La mayoría de las veces, el perro, aunque curioso, decidía retirarse a una esquina y observar a la gatita con cautela.
En el siguiente vídeo podemos ver cómo le dan un pequeño premio a Beck cada que se acerca al gatito.
Con el tiempo, la amistad entre los dos peludos de la casa ha ido aumentando, y ahora se pasan el día juntos en el jardín.
Beck siempre cuida de Bleu. Cada vez que el gato se sube a un árbol, el pastor alemán está allí para echarle un ojo, incluso si a veces da la impresión de que está a punto de devorarlo de una sola pieza.
¡Un auténtico trabajo en equipo!