Sola, asustada, buscando ayuda: su desesperación no dejó indiferentes a los clientes de la tienda Meijer en Grand Rapids (Michigan, EE. UU.) hace unas semanas.
Varios de los clientes decidieron actuar y, gracias a su paciencia, lograron ganarse su confianza y atraparla.
Entonces descubrieron que el animal llevaba atado al cuello una funda de plástico con un mensaje: "Me llamo Rukey. Por favor, ayúdame, llévame a casa".
Un nuevo comienzo
Cuando se hizo evidente que la perra había sido abandonada, quienes la encontraron la llevaron inmediatamente al refugio de animales del condado de Kent. Allí, la historia de Rukey conmovió a todo el personal.
A pesar de este gran cambio, Rukey se aclimató enseguida a su nuevo entorno. Aunque al principio la perra se mostraba tímida, pronto mostró su naturaleza dulce y cariñosa.
El refugio decidió dar a conocer su historia publicando una conmovedora entrada en las redes sociales, dirigida también a su antiguo propietario. Rukey fue esterilizada y sometida a un chequeo completo; todos los resultados fueron excelentes.
Al poco tiempo, una familia que se enamoró de ella a primera vista se puso en contacto con el refugio.
Un hogar lleno de amor
El refugio no ocultó su alegría tras la adopción y compartió la buena noticia con sus seguidores.
La publicación terminaba con un mensaje simple pero valioso: "Elige siempre la bondad".