"Bueno, alegre, un perro maravilloso en todos los sentidos", describe la protectora de animales de Coblenza (Alemania) a este perro de apenas un año.
Para los protectores de animales también estaba claro: "Debería haber tenido una vida maravillosa, ya había familias que lo estaban esperando".
"¡Klaus ya no está con nosotros!"
Klaus y su hermano Jörg son originarios de Rumanía. Desde allí, ambos fueron llevados a la protectora de animales de Coblenza, donde se ocuparon de ellos y les buscaron un hogar.
Las radiografías eran devastadoras: "Displasia de cadera grave bilateral (HD) con luxación, displasia de codo grave bilateral (ED) con artrosis grave".
Especialmente conmovedor era el hecho de que un perro tan joven padeciese enfermedades degenerativas tan graves. El refugio se pregunta si es la consecuencia de una cría irresponsable por parte de criadores poco serios.
Normalmente, en el refugio, a los perros enfermos se mantienen separados para su recuperación, pero a Klaus se le permitió quedarse con su hermano.
No había otra opción
"No había esperanza, el diagnóstico nos dejó devastados", confiesa el equipo de la protectora en la publicación viral de Facebook. Lo único que se podía hacer por Klaus era liberarlo de su sufrimiento.
Durante sus últimos días de vida, el animal pudo hacer todo lo que le gustaba, recibió "amor, calor, buena comida, analgésicos" y una cama blanda, quizás por primera vez en su corta vida.
La respuesta de los usuarios ha sido enorme. En apenas dos días, se han acumulado casi 3 340 comentarios con mensajes de condolencias y 21 800 me gusta y reacciones con emojis tristes.