En mayo de 2022, Erin Wilson paseaba con su perra Eva por la hermosa región de Big Bar, en el condado de Trinity, California.
Caminaban cerca de una zona de pícnic junto al río Trinity cuando la mujer escuchó un ruido extraño y, de repente, sintió un mordisco en el hombro.
Lo que prometía ser una tarde tranquila
No daba crédito: un puma acababa de morderle a Erin en el brazo izquierdo y se preparaba para un nuevo ataque.
Wilson se puso a salvo rápidamente, pero ahí no acabó todo: el puma mordió a la perra en la cabeza y no la soltaba. Preocupada por su querida pastor belga, la mujer comenzó a lanzar piedras al animal. El puma no cedía.
Erin regresó entonces a la carretera principal y detuvo un vehículo que pasaba, conducido por Sharon Houston. Al darse cuenta de la situación, esta sacó un bote de spray de pimienta y un tubo de PVC, y juntas corrieron hacia los animales.
Lamentablemente, el spray de pimienta apenas tuvo efecto. El puma se desvió del camino y arrastró a la perra consigo.
No lo duda ni un segundo
Erin no tenía intención de rendirse, así que comenzó a golpear al puma con el tubo de PVC hasta que el animal finalmente la soltó y huyó. La mujer llevó rápidamente al animal al Hospital Veterinario VCA Asher, ignorando sus propias heridas.
El pronóstico de Eva era incierto, pero Erin le suplicó que siguiera luchando: "Le dije: Quédate conmigo. Te quiero. No puedo vivir sin ti. No te vayas. No me dejes."
Al rescate
Para cubrir los gastos del tratamiento, Erin inició una recaudación de fondos en GoFundMe, ¡y reunió más de 32.000 dólares! La cantidad superó considerablemente las necesidades de la familia. La mujer explicó en Instagram para qué se utilizaría el dinero:
"Todos los fondos sobrantes se destinarán al postoperatorio, a mimarla, garantizar su seguridad y calidad de vida, a mis facturas médicas y a donaciones para algunas organizaciones benéficas."
Un triste final
La perra luchó por su vida y, gracias a los excelentes cuidados de los veterinarios y la familia, fue recuperándose cada día.
Lamentablemente, la perra falleció dos meses después, en 2022.
Casos asombrosos
