Cuando hace tiempo que tienes mascota y un nuevo miembro llega a la familia, es importante que los primeros contactos vayan bien, y que las presentaciones se hagan de forma correcta, para que la convivencia entre perros y gatos no acabe con la armonía del hogar.
Es el caso de esta familia que, teniendo un gran Husky en casa, decidió adoptar a un gatito…
El Husky con los gatos
El marcado instinto cazador de esta raza de perros hace que la convivencia con otras mascotas, sobre todo si son pequeñas, sea muy complicada. Pero como siempre decimos en Wamiz, todo depende del perro en cuestión, de su educación y de si las presentaciones entre ambos animales se han hecho de forma correcta.
Un vídeo sorprendente
Parece ser que fue el caso de esta familia, que unió a un grandullón con un lindo gatito. Extrañados ambos en un principio, pero poco a poco acostumbrándose el uno al otro, el encuentro entre estos dos peludos no puede ser más tierno. ¿Quién dijo que perros y gatos se odian?