¿Cuál es el mejor antiparasitario para perros?
Por desgracia, los perros son víctimas de parásitos como las pulgas y las garrapatas, especialmente en verano. Para evitar que los insectos le amarguen la vida a tu animal, te ayudamos a elegir el mejor insectífugo.
Ya sea en el jardín o por la calle cuando pasean, los perros deben hacer frente cada año a numerosos insectos y parásitos. Aunque algunos de ellos son inofensivos (¡menos mal!), otros pueden instalarse en su piel y transmitirle enfermedades.
Entonces, ¿cómo proteger a su perro contra estos indeseables huéspedes? Bien, el producto clásico es el insectífugo, un producto que combate pulgas, garrapatas e incluso mosquitos gracias a su compuesto.
Los insectífugos (fugare = ahuyentar, alejar) permiten repeler a los insectos para que no se acerquen más a tu animal. Esta solución no es tóxica para tu perro ni para los que viven en casa, y permiten una aplicación constante sin ningún peligro.
Además, otra de las grandes ventajas es que no matan a los insectos, por lo que no perjudican al medio y respetan la cadena alimentaria.
En cuanto a la frecuencia, como verás a continuación, hay insectífugos donde basta una sola aplicación, mientras que otros necesitan aplicarse regularmente para una eficacia total.
Índice
- ¿Cual es la diferencia entre un insectífugo y un insecticida para perros?
- ¿Cuáles son los diferentes tipos de antiparasitarios para perros que existen?
- Insectífugos para perros: ¿contra qué parásitos son eficaces?
- ¿Qué interés tienen los insectífugos para perros?
- ¿Cómo se aplica el tratamiento antiparasitario para perros?
- ¿Cada cuánto tiempo se debe aplicar el tratamiento?
- ¿Cuándo se debe desparasitar a un cachorro?
¿Cual es la diferencia entre un insectífugo y un insecticida para perros?
Los insectífugos son productos que ahuyentan a los insectos. Los insecticidas, sin embargo, acaban con ellos.
La mayor ventaja del insectífugo es que no tiene ningún impacto sobre la fauna y la flora, ya que dichos insectos no se mueren, simplemente buscan de qué alimentarse en otro sitio.
Podríamos decir que el insectífugo es un producto preventivo, no curativo.
¿Cuáles son los diferentes tipos de antiparasitarios para perros que existen?
Existen diferentes tipos de insectífugos para perros. Pueden presentarse en forma de champú, de collar, de comprimidos o de spray, aunque las pipetas son todo un clásico por su comodidad.
Consulta en tu clínica veterinaria qué producto se adapta más a la morfología y necesidades de tu perro.
Insectífugos para perros: ¿contra qué parásitos son eficaces?
La mayoría de los insectífugos funcionan contra pulgas y garrapatas. Algunos también repelen a los mosquitos y el demodex (ácaro microscópico).
Eso sí, los insectífugos no son eficaces a la hora de combatir gusanos intestinales o el arador de la sarna (otro tipo de ácaro). Para ello deberás hacerte con un producto especial.
¿Qué interés tienen los insectífugos para perros?
En primer lugar, es esencial proteger a tu animal contra pulgas, garrapatas, mosquitos y el demodex, que pueden transmitirle a tu animal y a ti graves enfermedades.
En primer lugar, la pulga es un insecto que pica para nutrirse de la sangre de los animales. Su ciclo de vida es muy rápido: en tan solo 48 h, una hembra puede poner hasta 50 huevos al día entre 50 y 100 días.
En general, los perros que llevan pulgas se rascan, por lo que en sí no es muy grave. En otros casos, la cosa puede ir a peor, y las picaduras pueden causar dermatitis alérgica (DAPP, una reacción alérgica a los componentes de la saliva de la pulga).
En segundo lugar, encontramos a las garrapatas. Estos ácaros enganchan el rostro a la piel de tu perro y le absorben la sangre. Una vez saciadas, simplemente se caen y no provocan más que una pequeña irritación local.
Por su parte, los flebotomos son los mosquitos transmisores de la leishmaniosis, una grave enfermedad que puede llegar a ser mortal. Este insecto se deja ver sobre todo por la noche, entre las 22 h y medianoche, tanto en otoño como en primavera.
Por último, el demodex es un parásito que no suele causar ninguna alteración, aunque en algunos perros la proliferación exagerada de este ácaro puede provocar sarna demodécica, también conocida como demodicosis canina.
¿Cómo se aplica el tratamiento antiparasitario para perros?
El modo de aplicación varía según el tipo de insectífugo que elijas:
-Los comprimidos deben ingerirse. Puedes, por ejemplo, mezclarlos con la comida de tu perro si no consigues que se los trague directamente.
-Las pipetas son muy fáciles de aplicar: basta con vaciar el contenido en la zona del cuello de tu perro para que no pueda chupar el líquido. Para que el producto sea eficaz y se absorba bien, retira el pelo y aplica el contenido directamente sobre la piel.
-El collar antiparasitario es otro de los accesorios más prácticos si quieres olvidarte durante unos meses de pipetas, comprimidos y otros productos. ¡Para qué complicarse tanto!
-El insectífugo en spray debe rociarse sobre el pelaje del perro. Su aplicación es más delicada, ya que la mayoría de los productos no deben entrar en contacto con los ojos.
-Por último, el champú antiparasitario es muy práctico para aplicar el tratamiento cuando duches a tu peludo compañero. ¡Bañado y protegido: así matas dos pájaros de un tiro!
¿Cada cuánto tiempo se debe aplicar el tratamiento?
Normalmente, el tiempo entre las distintas aplicaciones depende del tipo de producto que hayas elegido. Hay tratamientos que duran tan solo unas semanas, mientras que otros pueden llegar a ser eficaces durante 4 meses.
¿Cuándo se debe desparasitar a un cachorro?
Como ocurre con la mayoría de productos, no es recomendable la aplicación de un insectífugo en cachorros de menos de 12 semanas. Algunas marcas incluso recomiendan esperar hasta los 3 meses.