¿Cómo limpiar los oídos de un perro?
Orejones, orejitas, puntiagudas, colgantes… da lo mismo: es importantísimo que le limpies las orejas y los oídos a tu perro con regularidad para evitar la formación de polvo, suciedad y cerumen. ¡Adiós infecciones!
Los oídos de los perros son muy frágiles, y una falta de higiene puede resultar ser un verdadero nido de otitis, alergias, tapones de cera, etc.
Por ello, en esta guía te contamos cuáles son los productos para el oído que más se adaptan a esta zona tan sensible del cuerpo de tu animal.
Límpiale los oídos a tu perro al menos una vez cada dos semanas. Hazlo con cariño para evitar que se asuste o se enfade, ya que no les hace mucha gracia que les toquen las orejas.
Hazte con toallitas o gasas adaptadas para masajear la base del conducto auditivo y permitir que el líquido penetre correctamente.
¡Mucho ojo! Algunas razas tienen los oídos mucho más sensibles que otras, como es el caso de los perros de orejas colgantes, donde el aire no puede penetrar con tanta facilidad.
¿Cuándo llega tu pequeño cachorro a casa? Aquí te dejamos los mejores consejos y productos para mantener una buena salud auditiva.
Índice
- ¿Cómo limpiar bien los oídos de un perro?
- ¿Cada cuánto hay que limpiarle las orejas a un perro?
- ¿Cuándo sé que es hora de hacer una limpieza a fondo de los oídos de mi perro?
- ¿Qué necesitas para limpiarle las orejas a un perro?
- Limpiarle los oídos a un perro: ¿depende de la raza?
- Precauciones a la hora de limpiarle los oídos a tu perro.
¿Cómo limpiar bien los oídos de un perro?
Para limpiarle los oídos a tu animal correctamente, adquiere un producto limpiador adaptado al oído de tu pequeño compañero y unas toallitas o gasas.
Aplica unas cuantas gotas en el conducto auditivo y masajea la base del oído para asegurarte de que el líquido penetra bien. Este movimiento también hará que se vaya despegando cualquier impureza acumulada.
Después, deja que tu animal sacuda la cabeza. Esto ayudará a desprender los trozos de cerumen.
Para terminar, introduce una parte de la gasa en el interior del oído y limpia la suciedad y la cera todo lo que puedas. Con una toallita, haz un poco de presión en el oído del animal para que salga todo el líquido y cerumen disuelto y se absorba.
Cambia de gasa y toallita para repetir la misma operación en el otro oído.
¿Cada cuánto hay que limpiarle las orejas a un perro?
Normalmente, se recomienda limpiarle las orejas y los oídos a un perro cada dos semanas.
¿Tu perro es de oídos sensibles o tiene otitis o exceso de cerumen constantemente? Entonces, te recomendamos que le limpies los oídos una o dos veces por semana para eliminar bacterias que puedan crearle infecciones.
¿Cuándo sé que es hora de hacer una limpieza a fondo de los oídos de mi perro?
Si tu perro tiene infección de oídos, es muy importante que hagas una limpieza a fondo. Sigue al pie de la letra los consejos de tu veterinario/a de confianza para hacerlo de la forma más eficaz.
Si tu perro tiene sarna, debes tratarlo con un acaricida especial para tratar la infección y limpiar muy bien sus conductos auditivos. Luego, aplícale un producto antiparasitario especial.
¿Qué necesitas para limpiarle las orejas a un perro?
Lo más importante es que evites los bastoncillos de algodón, ya que estos no se adaptan al conducto auditivo de los animales y empujan el cerumen al interior del oído en lugar de expulsarlo. Sería imposible acceder al fondo con unos bastoncillos.
Para ello, busca toallitas y discos de algodón que no se deshilachen.
En caso de que se le haya metido una espiga a tu pobre animal, puedes utilizar una pinza para depilar.
Si, por el contrario, lo que molesta a tu peludo compañero es una garrapata, quítasela con una pinza especial (en forma de gancho) para que no se le quede la cabeza en la piel el cuerpo en la pinza.
Limpiarle los oídos a un perro: ¿depende de la raza?
Aunque hay que limpiarle las orejas a todos los perros, hay razas con los oídos más sensibles que necesitan un cuidado más regular.
- Perros de orejas colgantes, como los cocker. Debido a su gran tamaño, los oídos tienen más dificultad para airearse y la cera y la suciedad se forman con más frecuencia. Lo ideal para estas razas es una limpieza semanal.
- Los perros braquicéfalos (bóxer, bulldog francés) también son perros de oídos muy sensibles que tienden a la infección.
- Los labradores son perros que segregan mucho cerumen.
- Caniche y bichón. Su pelo largo obstruye el conducto auditivo y dificulta la aireación, lo que aumenta el riesgo de infecciones con respecto a las otras razas.
Precauciones a la hora de limpiarle los oídos a tu perro.
No utilices agua o cualquier otro producto que no sea especial para la limpieza de los oídos. Podrías hacerle daño, provocarle irritación o inflamación.
Por último, comprueba que el oído no libera ningún olor nauseabundo, que no sacude la cabeza y que no se rasca la oreja con demasiada frecuencia.