Los amantes de los gatos sabemos que no hay mayor alegría que encontrar el gato perfecto. Pero, ¿qué hacer si el animal ya tiene otro nombre que no nos gusta?
¿Se le puede cambiar el nombre a un gato o esto puede causarle confusión y estrés?
¿Los gatos saben su nombre?
La capacidad de tu gato para reconocer su propio nombre dependerá en gran medida de la educación y la interacción que haya tenido en el pasado.
Por lo tanto, los gatos "pueden" saber cómo se llaman. Lo que ocurre es que algunos responderán a su nombre moviendo la oreja o girando la cabeza, mientras que otros acudirán directamente a donde estén sus propietarios.
¿Se le puede cambiar el nombre a un gato adoptado?
Cambiar el nombre a un gato adoptado o conservar el que tiene es una decisión muy personal.
Sí es cierto que hay varios factores que incluyen en esta decisión, como puede ser la edad del gato.
En otros casos, sin embargo, un nuevo nombre puede simbolizar un nuevo comienzo para el animal, especialmente si su nombre está vinculado a experiencias traumáticas (abandono, maltrato, etc.) en su antiguo hogar.
Luego, están los gatitos de los refugios, donde el personal generalmente no tiene tiempo para enseñarle su nombre, lo que facilita la transición y reduce el estrés para tu nuevo amigo felino.
¡Vía libre para elegir un buen nombre para gatos!
¿Por qué en los refugios le ponen nombre a los gatos?
Los gatos y gatitos en adopción pueden recibir un nombre por parte del personal del refugio al llegar al centro.
Este nombre desempeña un papel crucial en la formación de la identidad de cada gato a la espera de encontrar un hogar.
¿Esto quiere decir que hay que mantener el nombre que el refugio eligió para tu nuevo compañero? Claramente, no. Es perfectamente posible cambiar el nombre a un gato.
Para facilitarte la tarea y el proceso de adaptación de tu felino, existen algunos consejos y trucos que puedes tener en cuenta.
Trucos para enseñarle a un gato su nuevo nombre
Una vez que hayas seleccionado el nombre ideal para tu gato, tendrás que ponerte manos a la obra rápidamente.
El momento después de la adopción es el ideal para realizar cualquier cambio de nombre, dado que tu gato estará en pleno proceso de adaptación a su nueva rutina y familia.
Para ello, puedes seguir los siguientes pasos:
- Comienza utilizando los dos nombres juntos. Por ejemplo, si el animal se llamaba Astor y le quieres llamar Pelusa, llámale "Astor-Pelusa" durante los primeros días e ir eliminando el antiguo poco a poco hasta que el animal empiece a reaccionar al nuevo.
- Dale tiempo, especialmente si es un gato mayor o tiene un duro pasado. Un cambio demasiado repentino podría resultar bastante estresante para el minino.
- La constancia es clave cuando se trata de que tu gato se acostumbre a su nuevo nombre. Practica llamándolos en diversas situaciones (comer, pasear, asearse, jugar, etc.) y ten siempre un premio, juguete o una buena ración de mimos para recompensar su esfuerzo.
Recuerda que es crucial no desanimarse solo porque al felino no te guste su nombre o no reaccione al mismo durante los primeros días.