Todos los que compartimos nuestra vida con algún felino sabemos lo maravilloso de su compañía y la forma delicada y misteriosa de demostrarnos su amor, veamos cómo este amor gatuno puede ser el pilar de un proceso terapéutico.
¿Qué es la terapia asistida con gatos?
La terapia asistida con animales podría definirse como la creación de planes terapéuticos por parte de un equipo especializado, en los que se incluye un animal específicamente seleccionado y entrenado como motivador a fin de mejorar la calidad de vida de los seres humanos. Si el animal de intervención es un gato, estaríamos hablando de terapia asistida con gatos.
No deberemos confundir esta rama con la de la etología felina que se centra en ayudar a los gatos con problemas de comportamiento a ser más felices, esta segunda aproximación sería más una terapia para gatos y no terapia asistida por gatos.
¿Qué es la gatoterapia?
La gatoterapia contempla la inclusión de gatos como elementos centrales dentro de una rehabilitación física o psicológica. Aquí podemos encontrar desde programas de terapia con gatos para niños, adultos, personas de la tercera edad o incluso programas de psicoterapia con gatos.
Terapia con gatos: beneficios
Existen numerosos beneficios en la interacción dirigida con gatos, veamos algunos más reseñables:
- Reducción del estrés y ansiedad: los gatos tienen la habilidad de transmitir calma y sosiego ayudando a nuestra mente a encontrar el camino hacia la quietud. Simplemente 20 minutos acariciando un gato nos ayudará a reducir factores fisiológicos asociados con el estrés.
- El ronroneo: Un gato ronronea dentro de un rango de 20-140 Hz, esto son ondas de baja frecuencia que ayudan a aliviar el dolor, promueven la sanación de músculos y tendones, reduce el estrés, ayuda a mejorar nuestro patrón respiratorio entre otras muchas acciones.
- Promueven la salud mental: Los gatos son animales cariñosos y amorosos, a pesar de tener la reputación de ser distantes y testarudos, ofrecen una compañía poco invasiva y sutil que puede favorecer espacios terapéuticos en los que las personas se sientan más seguras.
- Maestros en comunicación no verbal: los gatos tienen una manera sutil y deliciosa de comunicarse entre ellos y con nosotros los humanos.
¿Los gatos ayudan a reducir la ansiedad?
Como hemos mencionado anteriormente su presencia, acariciarlos, observarlos o simplemente disfrutar de una sesión de ronroneo gatuno ayudará a nuestra mente a favorecer estados de relajación y reducir la ansiedad que nos rodea.
Los gatos están demostrando ser grandes aliados en el control de la ansiedad en humanos. 😉
Críticas a la terapia con gatos
Sin embargo, todo tiene dos caras, así hay aspectos a tener en cuenta para poder desarrollar programas de Terapia Asistida con gatos de manera adecuada:
- La seguridad: tanto para el animal como para todas las personas involucradas: el gato de terapia debe ser un animal seleccionado y entrenado que disfrute de las sesiones junto a los humanos.
- Por otro lado, el manejo del gato de terapia ha de ser realizado por un profesional correctamente formado para evitar estrés en el animal y fomentar su bienestar durante las sesiones.
- Deberemos seguir un protocolo veterinario e higiénico adecuado para evitar zoonosis.
- Este tipo de intervenciones no es compatible con personas con cuadros de alergias o fobias específicas a animales.
Beneficios de vivir con un gato
Como compañera (o esclava humana según se mire) de 4 maravillosos mininos he de decir que su presencia en un hogar lo mejora desde todos los ángulos:
- Los gatos promueven emociones positivas.
- Generan espacios de calma y tranquilidad.
- Nos hacen reír.
- Promueven nuestra salud mental y física.
- Nos hacen compañía.