Durante la temporada navideña, debemos prestar más atención a nuestros perros. Con la llegada de paquetes y regalos, es necesario estar atentos a los repartidores, ya que en algún descuido pueden resultar heridos o algo mucho peor.
Puede sonar exagerado, pero el caso de este perro labrador es una advertencia para todos/as los que tenemos perro en casa.
Repartidor lanza paquete
Este relato comienza hace poco más de un año en una casa ubicada en la ciudad de Wawer, cerca de Varsovia, Polonia. Un día, el mensajero arrojó un paquete por encima de la valla. Sin embargo, el que recibió el paquete fue el perro.
El perro de la casa, llamado Izyy, logró abrir el paquete y después se comió el chocolate que había dentro.
Este incidente tuvo lugar el 6 de diciembre del año 2022.
"Un cliente de Alemania nos envió un paquete navideño que contenía diferentes dulces, chocolates, una pequeña botella de vino, etc.", dijo el cuidador del perro para un medio local.
Pero la situación empeoró cuando se dio a conocer que el empleado de la empresa de mensajería ni siquiera había llamado a la puerta. Simplemente arrojó el paquete por encima de la valla y se fue.
"Ninguno de los miembros de la casa sabía que había un paquete en nuestro jardín. El único ser vivo que estaba interesado en el paquete era un labrador de un año y medio, Izyy", añadió el propietario.
Intoxicación por chocolate
Al comerse dos tabletas de chocolate enteras, su cuerpo reaccionó de inmediato. El labrador sufrió vómitos, diarrea y convulsiones, síntomas típicos de la intoxicación por chocolate.
Recordemos que esta golosina contiene teobromina, un compuesto químico perjudicial para perros y gatos. Comer dos tabletas enteras de chocolate para un perro de tamaño mediano puede significar la muerte.
Afortunadamente, Izyy sobrevivió, pero estuvo muy mal durante dos días y tuvo que ser atendido por el veterinario.
La empresa notificó que iba a reembolsar el dinero por los daños ocasionados. Sin embargo, el tutor del perro no estaba conforme con esta respuesta, ya que consideró que el trato al cliente no había sido el adecuado.
"Me han ofrecido cubrir los costes de un envío 'dañado', ignorando por completo el hecho de que toda esta situación es el resultado de su trato hacia el cliente. El resultado podría haber sido pasar la Navidad llorando la muerte de un miembro de la familia; sí, Izzy es un miembro de nuestra familia", dijo el hombre.
Lo más importante es que el perro sobrevivió. ¡Mucho ojo con los paquetes que llegan a casa por Reyes!
