Habilidades de los perros
1. El olfato canino
Los perros tienen diferentes habilidades que los caracterizan y los hacen especiales, como ya se ha mencionado, una de ellas es su olfato perruno con el cual logran oler cosas desde una gran distancia.
2. Un perro reacciona ante los estímulos de su amo
Los perros son capaces de desarrollar habilidades como por ejemplo la de dar la pata ante una señal de su dueño. Ten en cuenta que reaccionan frente a estímulos por lo que si les das una galleta cada vez que hacen lo que quieres conseguir, aprenderán de forma más rápida y eficaz.
Otras de las habilidades que pueden desarrollar son la de sentarse a la orden de su dueño, seguir un rastro (gracias a su olfato perruno), buscar cosas y llevárselas a su dueño, tumbarse al oír determinada palabra y no cruzar límites físicos sin autorización.
3. Un can reconoce a las personas
Los perros son tan inteligentes, que también pueden reconocer a personas, todo esto si la asocia con un vínculo positivo y si ya tiene un vínculo creado y reafirmado con esta persona.
4. Los perros distinguen todo lo que les rodea
Por otra parte, y a pesar de tener una visión monocromática, pueden distinguir todo lo que los rodea gracias a las escalas de grises en las que ven. Pueden recordar cosas y son animales bastantes gestuales, por lo que será fácil conocer su estado de ánimo si nos fijamos en su lenguaje no verbal.
El olfato de los perros
Como hemos mencionado anteriormente, una de las grandes habilidades que poseen los perros es su olfato perruno. Este les ayuda a adoptar habilidades como las de encontrar objetos o personas.
De hecho, gracias a esto, son utilizados para hallar víctimas de catástrofes naturales o para detectar enfermedades importantes como es el cáncer o la diabetes.
La capacidad más desarrollada por los perros
La capacidad olfativa de un perro es una de las cualidades más desarrolladas que poseen y les ayuda también a orientarse en el entorno que los rodea y a comunicarse.
Se dice que la capacidad de olfato de un perro es su carta de presentación, pues solo olisqueándose con otro perro pueden descubrir la raza, sexo y edad del otro. Por ello, les sirve también como método de comunicación.
En cuanto a su anatomía, hay estudios que demuestran que la capacidad de oler de un perro es más desarrollada que la de los humanos ya que poseen alrededor de más de 40 células olfativas. Es decir, muchas más de las que poseen las personas.
El cerebro de los perros es solo una décima parte de lo que abarca el cerebro humano, pero las áreas destinadas al olfato son 40 veces más grandes que el que se encarga de la capacidad olfativa de las personas.
La capacidad olfativa de una persona normal es de 5 cm cuadrados, mientras que la capacidad olfativa de un perro es de 150 cm cuadrados, por lo que son capaces de distinguir más olores a un buen radio de distancia.
¿A qué distancia puede olfatear un perro a su amo?
Hay científicos que afirman que la capacidad olfativa de un perro hacia su amo puede llegar hasta 200 metros. Es decir, son capaces de olfatear algún objeto o alguna persona en un radio de 200 metros.
Sin embargo, han existido casos de perros cazadores cuya capacidad olfativa ha llegado a alcanzar un radio de más de 300 metros.
La capacidad olfativa puede ser estimulada
Si quieres que tu perro desarrolle todavía más su capacidad olfativa es importante comenzar a entrenarlo desde pequeño porque la capacidad olfativa de un perro está mucho más desarrollada cuando ellos son pequeños.
En esta etapa, poseen sensores de calor en su nariz que les permite encontrar a su madre. Esto último sucede mientras sus ojos y sus oídos están tapados. A medida que crecen, sus ojos y oídos también comienzan a desarrollarse y estarán listos para aprender nuevas cosas.
Pero la práctica de entrenar a los perros para detectar olores no es una novedad sino que surgió hace muchos años marcada por la necesidad de ser utilizados para cazar, pastorear o para hallar olores inusuales. De hecho, se les empleaba para hallar las heces de ballenas.
Gracias a que pueden mover sus fosas nasales de forma independiente, les es mucho más fácil detectar de qué dirección proviene el olor. Cuando estos perros hallaban las heces de ballenas, reclinaban sus cabezas hacia la dirección del olor, o simplemente movían las orejas.
¿Por qué deberíamos tener un perro?
Además de ser compañeros fieles y brindarnos su compañía de forma incondicional, los perros también pueden aportarnos diversos beneficios como la reducción de la ansiedad y el estrés. Por lo tanto, tener un perro nos hará más felices.
1. Vida social más activa
Estos nos brindan una vida social más activa, pues no existe persona a la cual no le guste hablar de su mascota y para muchos, esto resulta bastante fascinante. En todos lados hay al menos una persona amante de los animales.
2. Ayuda a personas con diversidad funcional
Gracias a su capacidad de aprender y a su inteligencia, son de ayuda para las personas con diversidad funcional. Muchos de ellos son entrenados desde pequeños para auxiliar a personas ciegas o personas con limitada movilidad de su cuerpo.
Por otro lado, también se convierten en una compañía útil para personas con autismo, pues ellos se encargan de estimular sus áreas críticas (áreas encargadas del funcionamiento social, la atención y la concentración).
3. Mayor inmunidad ante los virus y bacterias
Además, son capaces de ayudan a incrementar la inmunidad. Según estudios, las personas que poseen perros en sus hogares son menos propensas a enfermar en comparación con aquellas personas que no tienen perros. También se ha demostrado que pueden ayudar a que los niños a ser menos propensos a desarrollar alguna alergia a lo largo de su vida.
4. Adopta un perro y actívate
Finalmente, los perros ayudan a mantenernos en forma activa y nos convierten es seres más sociables. Por lo tanto, deberías adoptar un pequeño peludo, ¡te va a llenar de felicidad!