El tamal mexicano es un platillo hecho a base de masa de maíz, rellena de muy diversos ingredientes (pollo, cerdo, queso o de dulce) y cocida al vapor en hojas vegetales de maíz, plátano, carrizo, chilaca o papatla.
En México existen unas 500 recetas y según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural se utilizan unas 12 millones de toneladas de maíz al año tan solo para preparar este platillo típico.
Dada su gran importancia, no es de extrañarse que cientos de miles de familias mexicanas consuman tamales casi cada semana y a veces casi a diario.
Y por eso mismo, es muy probable que más de uno le haya dado a probar un delicioso tamal al perro del hogar una o más veces, pero ¿es una buena idea?
¿Los perros pueden comer tamales?
Esta no es una pregunta que se pueda responder con un simple sí o no, sino con un clarísimo: depende.
Tal y como mencionamos más arriba, existen hasta 500 recetas para preparar un tamal, por lo que los ingredientes pueden variar enormemente y de estos dependerá que nuestro perro pueda comerlo o no.
Empecemos con la opción más común: los tamales verdes y rojos que se pueden encontrar en cualquier carrito o puesto de tamales.
Estos tamales son preparados con manteca de cerdo por lo que contiene mucha más grasa que la que un perro necesita en su dieta diaria.
Un pedacito seguro no le hará daño, pero alimentarlo de forma regular con estos tamales, probablemente le causarán sobrepeso y enfermedades cardiovasculares.
Además, la masa de los tamales tradicionales se prepara con mucha sal, la cual puede ser muy dañina para tu perro si la come en exceso, causando problemas en la presión arterial y hasta intoxicaciones por exceso de sodio.
Otra cosa que hay que considerar es que muchos de estos tamales tienen pedazos de cebolla, ajo y otras especias que son perjudiciales para los canes y les pueden generar serios problemas gastrointestinales.
Incluso si el tamal no tiene pedazos de cebolla o especia, la salsa roja y verde con la que se hacen sí las contiene, por lo que insistimos, no es buena idea darle a tu perro tamales tradicionales.
Con los tamales dulces, el problema es un poco menor al no tener esas especias, pero el exceso de sal y grasa siguen siendo los mismos.
Considerando todo lo anterior sí le puedes dar tamal a tu perro, pero solamente un pedacito de vez en cuando y asegurándote que no contenga ingredientes peligrosos como cebolla u ajo.
¿Hay tamales para perros?
Aunque los tamales tradicionales no son la mejor opción para nuestros lomitos, lo cierto es que sí hay alternativas para que prueben este delicioso platillo mexicano.
Los tamales para perro se hacen de la siguiente forma:
- En lugar de harina de maíz, utiliza harina de arroz sin añadir manteca para que así no sea grasoso.
- Mezcla la harina de arroz, añade una pizca de sal y revuelve hasta que quede la consistencia de una masa parecida a la de un tamal normal.
- Coloca la masa sobre una hoja de plátano o de sal (bien lavada) y una vez que le hayas dado la forma que más te gusta rellénala.
- La masa se rellena de ingredientes más sanos como zanahoria, chícharos y pollo cocido y desmenuzado.
- Envuelve y déjalos cocer por 25 minutos.
Si se te complica mucho prepararlos, no te preocupes, existen muchos negocios que se dedican a vender tamales especiales para perros como Petco, Tamalito Dog, Tamalitos Doña Bimba y Dog and Roll, entre otros.
¿Los perros pueden comer elote?
Los tamales tradicionales no están recomendados para perros por la gran cantidad de ingredientes que les pueden hacer daño, pero ¿qué hay del elote, el ingrediente principal del maíz?
El grano del elote en sí mismo no representa un peligro para nuestros perros, de hecho les puede gustar y proporcionar algunos nutrientes.
Eso sí, tampoco puede ser el alimento principal de su dieta, ya que los lomitos requieren los nutrientes proporcionados por otros tipos de alimentos, además de que deben comer el elote sin la mazorca o corren el riesgo de ahogarse.
Ahora ya lo sabes, tu perrito sí puede comer tamales, pero asegúrate que estén especialmente hechos para él o ella o de lo contrario podrían causarle problemas de salud.
¿Mi perro puede comer...?
