El ultrasonido en la medicina veterinaria es una herramienta de diagnóstico por imagen no invasiva e indolora, es decir, que no causa dolor en las mascotas.
Es considerado como el complemento de los estudios radiográficos y ayuda a determinar la existencia de algún proceso patológico o enfermedad, que esté sucediendo en el interior del organismo de un ser vivo. En este caso, de un perro.
Ultrasonido para perros: cómo funciona
El ultrasonido es un equipo que funciona a través de ondas de sonido de alta frecuencia que se emiten en forma de pulsos hacia el cuerpo.
Los ecos que vuelven son analizados por ordenadores que transforman dichas ondas en imágenes, reflejando así los tejidos, los órganos y hasta el flujo sanguíneo del organismo, mientras se proyectan las imágenes en una pantalla.
Para realizar un ultrasonido en un perro, es necesario que el can se encuentre tranquilo, debido a que estos estudios se realizan con el animal recostado.
Probablemente el veterinario tenga que rasurar el pelo del área donde se realizará el ultrasonido, debido a que este interfiere en la emisión, transformación y proyección de las imágenes de los órganos a analizar.
Antes de comenzar el estudio, debe aplicarse sobre la piel del perro un gel a base de agua, que ayuda en la transmisión de las ondas de sonido emitidas por el equipo.
Posteriormente, el médico veterinario colocará el transductor, que actúa como el emisor y el receptor del ultrasonido gracias a los cristales contenidos en su interior. Dichos cristales son los encargados de vibrar y emitir el sonido para la proyección de las imágenes.
El transductor permite explorar un campo cercano o lejano de la imagen, usando sonidos en diferentes frecuencias. El ecógrafo o receptor procesa estas imágenes y genera una imagen diagnóstica a través de la pantalla.
En este video puedes ver un ultrasonido a una perra embarazada, para que observes el procedimiento paso a paso:
¿Cuánto cuesta un ultrasonido para perros en México?
El costo del ultrasonido para mascotas varía dependiendo de diversos factores:
- Zona geográfica y socioeconómica.
- Centro veterinario al que acudas.
- Tipo de estudio que necesita el canino.
Existen estudios básicos para mascotas donde solo se necesita ver un órgano en especial, mientras que otros estudios necesitarán realizar una evaluación más especializada y detallada para llegar a un diagnóstico más preciso.
¿Cómo sé si mi perro necesita un ultrasonido?
Sólo el médico veterinario, con base en la historia clínica del perro, determinará si es necesario realizar un ultrasonido en la mascota y qué tipo de estudio es el más adecuado.
Dentro de la práctica clínica veterinaria, el ultrasonido en perros es utilizado frecuentemente. Gracias a esta tecnología se puede hacer el diagnóstico de diversas patologías en las mascotas, dependiendo el área a evaluar.
Ultrasonido del abdomen
La ultrasonografía de abdomen evalúa:
- Si existe algún tipo de líquido en el abdomen de la mascota. Sirve también para realizar toma de muestras de éste.
- Los principales vasos sanguíneos del abdomen
- El tamaño de los linfonodos -o ganglios linfáticos- en el abdomen.
Ultrasonido del estómago
La ultrasonografía del tracto digestivo sirve para evaluar:
- El grosor de las paredes del estómago e intestino de las mascotas.
- Si existe inflamación en el estómago del perro, neoplasias, obstrucción o presencia de cuerpos extraños dentro del tracto gastrointestinal.
Ultrasonido del hígado
La ultrasonografía de hígado sirve para evaluar:
- La forma y tamaño del hígado del perro, así como la presencia de inflamación o neoplasias en el órgano.
- El estado de la vesícula biliar y su contenido, así como la posible presencia de cálculos biliares.
- Los conductos hepáticos (es decir, del hígado) así como su probable inflamación u obstrucción.
Ultrasonido del bazo
La ultrasonografía de bazo se usa para evaluar la forma y tamaño del bazo del perro, sus principales vasos sanguíneos, así como la probable presencia de neoplasias en este órgano.
Ultrasonido de vías urinarias
La ultrasonografía del tracto urinario se usa para evaluar:
- El tamaño y forma de los riñones de la mascota.
- La posible presencia de inflamación, cálculos y/o neoplasias renales.
- El tamaño, forma y grosor de la vejiga así como su contenido: presencia de sedimentos, cálculos o neoplasias.
Ultrasonido del aparato reproductor
La ultrasonografía de tracto reproductor en las mascotas es muy útil tanto en hembras como en machos.
En las hembras, este tipo de ultrasonido es útil para el diagnóstico de infección uterina (piometra) así como para diagnosticar la gestación si hay señales de embarazo en perros, o a partir del día 28-30 después del apareamiento.
En los machos, este tipo de ultrasonido ayuda a la evaluación del tamaño de la próstata y a localizar testículos retenidos en el abdomen.
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