Enseñar a un perro a quedarse quieto no es solo un ejercicio de obediencia básica, sino una herramienta fundamental para su bienestar emocional.
Da igual si tu perro es nervioso, inquieto o simplemente te sigue a todas partes: aprender a parar, esperar y mantener la calma le ayuda a gestionar mejor el estrés y a relacionarse de forma más equilibrada con su entorno.
Por eso, además de órdenes como sentarse o tumbarse, te explicamos cómo enseñar a un perro a quedarse quieto, paso a paso, con la ayuda del educador canino Sergio Tallón, de Senda Canina.
¿Por qué es tan importante enseñar a un perro a quedarse quieto?
Según explica Sergio Tallón, la base de este ejercicio no es la inmovilidad en sí, sino el estado emocional del perro:
Sergio TallónEducador de perros en Senda Canina Si el perro no es capaz de estar sentado o tumbado unos minutos sin estar tranquilo, nunca podrás alejarte del perro ni un paso".
Un perro que aprende a quedarse quieto desarrolla autocontrol, reduce la ansiedad y mejora su capacidad de concentración. Es mucho más saludable que viva en calma que en un estado permanente de excitación.
Cómo enseñar a un perro a quedarse quieto: elige bien el comando
Antes de empezar a cómo enseñar a un perro a quedarse quieto, necesitas una palabra clave. Lo habitual es usar "quieto", pero Sergio aclara que "puedes usar la palabra que quieras, pero es fundamental que siempre sea la misma".
Cómo enseñar a un perro a quedarse quieto paso a paso
Sergio Tallón explica cómo enseñar a un perro a quedarse quieto de forma progresiva y sencilla. Estos son los pasos clave:
1. Estado emocional adecuado
Interesa que el perro haya aprendido a sentarse y a tumbarse de una manera tranquila y no activa. Antes de trabajar el "quieto", el perro debe saber sentarse o tumbarse desde la calma, no desde la excitación.
2. Primeros segundos quieto
Con el perro tumbado, le decimos el comando "quieto", damos un paso atrás y, si se mantiene en la posición: "Le marcamos con ‘muy bien’ y le premiamos con snacks. El refuerzo positivo es muy importante".
3. Qué significa realmente el comando
"Con el comando ‘quieto’ le queremos trasladar al perro el mensaje de: me voy a alejar de ti y tienes que mantenerte en esa posición".
No es solo quedarse quieto unos segundos, sino mantener la posición mientras el guía se aleja.
4. Progresión gradual
"Siempre lo haremos de forma progresiva. Doy un paso hacia atrás, te marco el ‘muy bien’ y te premio". Paso a paso. Un metro más, un segundo más. Sin prisas y sin saltarse etapas. Cada mini avance cuenta.
5. La prueba de fuego: las distracciones
Para comprobar que el perro ha interiorizado el ejercicio, Sergio recomienda introducir distracciones reales: "Ya sea en un parque, con ruido, gente, niños… o con lo que más le gusta al perro, su juguete favorito".
En el vídeo de arriba, el educador canino pone a prueba al perro con su kriptonita: una pelota. El objetivo es que el perro mantenga la calma pase lo que pase a su alrededor.
Tips finales para enseñar a un perro a quedarse quieto
No le castigues si falla: vuelve un paso atrás.
Premia siempre la calma, no la excitación.
Sé constante y paciente.
Practica en diferentes entornos.
Aprender a quedarse quieto no solo mejora la obediencia, sino que fortalece el vínculo entre perro y humano y le da herramientas para gestionar mejor su día a día.