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ataques de perro

Un perro intentando atacar

© Shutterstock

Ataques de perros: ¿cómo evitarlos?

Por Sindy Bustamante Redactora

Actualizado el

¿Los perros son agresivos desde su nacimiento? Al contrario de lo que puedan pensar algunos sectores de la sociedad, por lo general un perro no es agresivo por naturaleza, sino que un conjunto de factores desencadenan este problema de comportamiento. 

Una mala socialización desde cachorros, unos dueños irresponsables o una exposición a grandes niveles de estrés, pueden dar lugar a perros inestables que reaccionan de forma negativa según qué situaciones. No obstante, puedes encontrarte en el lugar y momento menos oportuno, por lo que debes estar preparado ante los ataques de perros, ya que puedes evitarlos.

En el siguiente artículo, hablaremos de cómo pueden desencadenarse y de cómo actuar frente a los ataques de perros. 

Situaciones que incitan los ataques de perros

Existen razas de perros categorizadas como razas de perros potencialmente peligrosos (PPP), pero esta es una etiqueta impuesta por los efectos de propietarios irresponsables. Simplemente son perros que por su morfología, anatomía y nivel de energía, han sido utilizados en peleas de perros, se ha incentivado su carácter para causar miedo y crecer el ego del dueño.

Si bien, es cierto que la mayoría de los ataques registrados han sido causados por perros de razas PPP, ya que suelen resultar graves por la potencia de su mordida y actitud de presa, pero todos los días ocurren ataques por parte de Chihuahuas, Caniches y otros perros de tamaño pequeño, a los que se les resta importancia. 

Sea un perro de raza grande o pequeña, PPP o no, siempre encontraremos una razón que de origen a esta agresividad, por ejemplo, por una mala socialización desde pequeños, algún trauma que le genere terror o que han sido entrenados para comportarse de esa manera.  

¿Por qué se desencadenan los ataques de perros?

A continuación describimos algunas de las situaciones por las que se producen los ataques de perros: 

  1. No respetar el espacio individual. Acercarse a un perro que no conocemos e ir directamente a tocarlo puede interpretarse como una amenaza. Siempre debemos preguntar a su propietario y presentarnos de la forma correcta.

  2. Invadir su territorio. Algunos perros desarrollan un carácter guardián de su casa y protector de los suyos. Un desconocido dentro de su entorno, lo entiende como una amenaza y por lo tanto, tratará de mantener el peligro lejos de su familia. 

  3. Por miedo. Puede que un perro haya sufrido una situación muy traumática en su vida, como el maltrato o el abandono, y desconfíe de personas extrañas. En este caso, puede ocurrir el ataque porque el perro trate de alejar ese miedo y se sienta amenazado. 

  4. Porque esté entrenado para ello. Como hemos mencionado anteriormente, algunos propietarios entrenan a sus perros para el ataque y la defensa, puede tener fines laborales o lucrativos.

Estas son las situaciones más frecuentes, aunque existen multitud de factores que pueden hacer que un perro ataque. Un perro puede atacar para defender a un ser querido, porque se sienta amenazado, porque tenga un problema de comportamiento o sufra un alto nivel de estrés. La agresividad es un problema de conducta que puede ser tratado, aunque para ello es importante rodearse de la ayuda adecuada, como un etólogo, educador o adiestrador canino.

Cómo evitar los ataques de perros

El ataque puede estar dirigido a otros perros, solo hacia desconocidos, a niños, etc. Sin embargo, nos vamos a centrar en los ataques de perros hacia las personas y cómo debes actuar en una situación tensa para evitarlo.

Es de vital importancia que tengas en cuenta que, para atender algún tipo de ataque en concreto, te recomendamos que contactes con un profesional, él o ella sabrá guiarte y darte las herramientas que necesitas en ese momento. 

En la siguiente lista mencionamos cómo debemos actuar frente a los ataques de perros para poder evitarlos:

  1. Mantener la calma. Es muy importante que si un perro se muestra agresivo contra ti, respires, te concentres en mantener la calma y no realices movimientos rápidos y de pánico como salir corriendo. Tampoco debes ponerte a gritar ya que eso aumentaría el nerviosismo del perro y agrava la situación.

  2. Evita el contacto directo. Esto quiere decir no tocar al perro y tampoco mirarlo. Debes pasar tranquilo, confiado, sin mirarle a los ojos y siguiendo tu camino. Si en su lugar, te encuentras que no puedes avanzar, mantente inmóvil, con la mirada alta hacia el frente y recuerda, debes ignorarlo y mostrar una actitud confiada. 

  3. Protégete. Si un perro te ataca, protege tus partes más vulnerables como cara y garganta. Ponte boca abajo y no entres en pánico ya que los gritos y la excitación, avivará más la agresividad del perro. 

  4. Defiéndete. Si ya te encuentras con el perro encima de ti, mordiéndote, puedes tratar de deshacerte de él pero de forma eficiente. No zarandees la zona de mordida (por ejemplo, la mano o la pierna) ya que puedes sufrir un desgarro, además de que el perro no soltará al considerarte su presa. Utiliza la ventaja de tu peso para inmovilizarlo, o si se encuentra sobre ti, sujeta su cuello con los brazos bien extendidos hasta que alguien pueda ayudarte.

  5. Pide ayuda y atiende las heridas. Si por desgracia, has sufrido el ataque de un perro, es importante acudir rápidamente a un médico para que atienda las heridas. Se trata de heridas con alta probabilidad de infección que precisan curas diarias, e incluso, antibióticos. 

En conclusión, los ataques de perros suelen tener una explicación de por qué ha ocurrido. Debemos ser responsables y actuar en consecuencia, con ello nos referimos a evitar exponernos a situaciones conflictivas. Si es nuestro perro el que muestra agresividad, debemos poner los medios necesarios para resolver el problema, siempre con ayuda de un profesional.

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