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enseñar al cachorro a hacer pipi y caca
© Austin Kirk

Enseñar al cachorro a hacer sus necesidades: las claves del veterinario

Por Sindy Bustamante Redactora

Actualizado el

En general el aprendizaje del perro en cuestiones de aseo es uno de los que más preocupa a los dueños. Tienen, a menudo, miedo de no llegar a conseguirlo y tener que limpiar durante toda la vida del animal. Pero podéis estar tranquilos: esto sucede muy rara vez. ¡Mira cómo enseñar a tu perro a que sea limpio!

El aprendizaje del aseo 

Lo malos hábitos en este aspecto son muy difíciles de eliminar y la reeducación de un perro que es “sucio” es igualmente complicada. Este aprendizaje condiciona, a menudo, el resto. Porque si el amo falla en al enseñar a su cachorro cómo ser limpio, se sentirá incapaz de educarle en otras cuestiones y considerará que su perro no entiende nada. Las relaciones amo-perro se suelen ver degradadas y menos propicias para una educación sencilla y positiva cuando esto sucede.

Desde el punto de vista anatómico, el control de los esfínteres (los músculos que permiten controlar), no está completo antes de los 4 meses. El cachorro comprende rápidamente (entre los dos y los tres meses) que tiene que hacer sus necesidades fuera del lugar donde duerme (le debe eso a su madre que lo “empuja” lejos del nido para que haga sus necesidades). Y es todavía más duro para él asimilar que lo tiene que hacer fuera de casa. En un primer momento, lo puede hacer en casa, pero en un lugar preciso, luego hay que hacer que salga, y hay que hacerlo lo más rápidamente posible.

¿Cuándo y por qué?

No hay que preguntarse a qué edad los perros se vuelven aseados, es algo que varía de un perro a otro. Solo conseguirás preocuparte si tu perro lo consigue un poco más tarde. No hay que alarmarse antes de los 7 u 8 meses, incluso si la norma es que esto suceda entre los 4 y los 6. El por qué de la limpieza del perro no se cuestiona. Algunos entrenadores de perros muy pequeños como los York o los Chihuahua, no están todavía convencidos de que sea necesario que hagan sus necesidades fuera. Pero el “baño” del perro debe estar fuera de casa. No es muy sano que un perro, aunque sea pequeño, haga sus necesidades eternamente en un trapo o en el balcón.

Las reglas básicas del aseo canino

  1. No esperar: el aprendizaje debe hacerse entre los 3 y 5 meses. “Voy a esperar a que sea más grande y comprenda que tiene que hacerlo fuera”. Hay que quitarse esa idea de la cabeza, que muchos dueños adoptan y es errónea. De hecho, el cachorro de tres meses comprende perfectamente las órdenes que le das.

  1. Tolerar los pequeños accidentes: ten en cuenta que habrá “accidentes” durante algún tiempo hasta que el animal aprende a ser limpio. No hay que aceptarlos, pero sí tolerarlos. Asimismo, perdona los pequeños despistes causados por la emoción.

Los castigos deben estar prohibidos cuando se está enseñando el aseo al perro. Este aprendizaje es un ejemplo en sí mismo de educación positiva, basado en la recompensa. 

  1. Limpie cuando no esté presente: no limpies nunca sus “fugas” delante de él: tu posición sentado con una esponja o fregona en la mano le incitará a jugar. No lo castigamos, pero tampoco le permitimos regocijarse. Dejar que ponga ahí su nariz es bastante negativo. 

El perro no siente un asco particular por sus cacas, pero sentirá tu desagrado y la próximas vez lo hará en un lugar en el que no lo veas (ya que el comprende muy bien lo que sucede, aunque sea pequeño). También puede llegar a comerse sus excrementos para hacerlos desaparecer.

  1. Acortar todo lo posible el periodo en el hogar: que el perro haga sus necesidades en casa al principio no lo podemos evitar, pues para salir a la calle debe estar completamente vacunado (incluso si hay vacunas que le permiten salir desde muy pronto). Pero el tiempo que tiene que hacer sus necesidades en casa está ahí, y  debemos intentar que sea lo más corto posible.

Escrito por: Dr Stéphane Tardif Veterinario y redactor de Wamiz 

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