El análisis de una muestra de orina aporta información clave, no solo sobre la salud del sistema urinario del gato, sino también sobre su estado de salud general.
Pero, ¿cómo hacer una prueba de orina en gatos, ya sea para un control preventivo o para diagnosticar una posible enfermedad?
Prueba de orina en gatos
Realizar una prueba de orina de forma preventiva puede ser especialmente útil, ya que permite detectar ciertas afecciones en etapas tempranas, como las enfermedades renales, una de las más comunes en los gatos.
¿Cuándo realizarle un análisis de orina a un gato?
En gatos de 7 a 8 años en adelante, es recomendable realizar análisis de orina de manera regular.
Asimismo, la prueba de orina en gatos es recomendable realizarla cuando se detectan algunos de los siguientes síntomas:
- Cambios en el patrón de micción: frecuencia aumentada, orinar en pequeñas cantidades, presencia de sangre (hematuria) o cambios en el color de la orina.
- Dolor o incomodidad: molestias al orinar, micción fuera del arenero.
- Aspecto de la orina: orina espumosa o con cambios significativos.
- Otros signos: aumento de la ingestión de agua, lamido excesivo del abdomen.
¿Qué enfermedades se pueden detectar con la prueba de orina en gatos?
El análisis de orina en gatos es crucial para animales que han sufrido infecciones del tracto urinario o para diagnosticar enfermedades, como:
- Diabetes.
- Insuficiencia renal crónica o aguda.
- Cálculos renales.
- Enfermedades hepáticas.
- Hipertensión.
- Trastornos metabólicos.
Prueba de orina en gatos: 5 métodos para tomar una prueba
Método 1: quitar la arena del arenero
Este método es simple, pero funciona únicamente si el gato es capaz de usar el arenero sin tierra. Antes de comenzar, asegúrate de esterilizar la caja de arena completamente. Luego, espera a que el gato orine en la caja vacía.
Una vez que el gato orine, utiliza una jeringa o pipeta esterilizada para recoger la muestra de orina. Finalmente, transfiere la orina al un recipiente estéril, que puedes adquirir en cualquier farmacia.
Método 2: una arena especial
Para los gatos más acostumbrados a hacer sus necesidades en la arena, existen arenas diseñadas específicamente para recolectar muestras que se pueden encontrar en tiendas de animales y en sitios web especializados.
Estas arenas suelen presentarse en forma de pequeñas perlas de plástico que, a diferencia de las arenas tradicionales, no absorben el líquido. Esto permite recolectar la muestra más fácilmente.
Antes de usar la arena especial, es importante lavar y esterilizar bien el arenero. Coloca la arena especial en el arenero y, una vez que el gato haya orinado, utiliza una jeringa o pipeta para recoger la orina.
Tercer método: muestra directa
Este método es ideal para quienes tienen paciencia y buenos reflejos, ya que permite obtener una muestra prácticamente limpia. Para recolectar la muestra, espera pacientemente con un plato o platillo limpio y esterilizado en la mano, cerca de la caja de arena.
Cuando el gato se agache para orinar, coloca el plato debajo de la abertura uretral para recoger la orina directamente.
Si el gato está muy cerca de la grava al orinar, puedes intentar levantar o inclinar ligeramente su cola para facilitar el proceso.
Método 4: arenero relleno con algodón
Rellenar la superficie del arenero con algodón estéril (y no algodón cosmético común) puede ser otra opción.
Cuando el felino haya hecho sus necesidades, utiliza guantes para exprimir la orina absorbida en un recipiente. Este método solo debe considerarse cuando los otros métodos, que son más fiables para evitar la contaminación, no hayan funcionado.
Prueba de orina en gatos: cuándo ir al veterinario
Si no puedes recolectar una muestra de orina en casa, lo mejor es visitar al veterinario.
Esta 5ª y última opción debe realizarse cuando el gato tenga la vejiga llena, lo que significa que debe evitar orinar al menos durante las dos horas que preceden la consulta.
Para ello, el veterinario puede emplear varios métodos:
- Masajear la vejiga para "exprimir" la orina y estimular el flujo urinario, aunque este procedimiento se emplea cada vez menos debido a posibles riesgos de traumatismo, especialmente en casos de obstrucción uretral.
- Recurrir al cateterismo (inserción de un pequeño tubo (catéter) a través de la uretra hasta la vejiga) para obtener una muestra limpia. Es un procedimiento sencillo en gatos machos, pero en hembras puede ser más complicado y, en algunos casos, requiere sedación.
- En casos más invasivos, se puede realizar una cistocentesis, que consiste en perforar la vejiga para obtener una muestra estéril, ideal para cultivos. Sin embargo, esta alternativa puede ser invasiva y estresante para el gato, por lo que solo se recomienda si se necesitan muestras para pruebas específicas.
Cómo llevar la prueba de orina al veterinario
Es mejor llevar orina fresca a la clínica a las 2 horas posteriores a la toma de la muestra. Si no es posible, se puede guardar el bote o frasco hasta 4 horas en el frigorífico.
Normalmente, se recomienda recolectar la orina por la noche, antes de las comidas (el pH de la orina de un gato aumenta después de comer), a menos que el veterinario recomiende un horario diferente. Lo mejor será una muestra de orina "a mitad del chorro".
Para una prueba general, suele ser suficiente una pequeña muestra (5-6 ml). Si también se solicitó cultivo de orina (para detectar posibles microbios), se requerirá una muestra aparte el tiempo que el veterinario estime oportuno.