Antes de hablar sobre las dietas para gatos con problemas hepáticos, es necesario detectar la enfermedad, ya que cambiar la alimentación de tu gato sin que su salud lo requiera puede ser peligroso.
"Cuando decimos a nuestros clientes que su gato tiene problemas hepáticos, nos miran raro, ya que piensan que estos problemas son cosa de humanos. Nosotros decimos que los gatos se parecen más a nosotros de lo que creemos y que la alimentación hace mucho en estos casos", asegura la veterinaria María Álvarez.
Una vez diagnosticada la afección hepática por un profesional, ya podremos abordar cuál es la mejor dieta para gatos con problemas hepáticos.
Dieta para gatos con problemas hepáticos
1. Atención a los piensos
Si tu gato sufre de problemas de hígado, tendrás que cambiar la manera y el tipo de pienso que le administras. Para ello, existen piensos específicos, comúnmente denominados "piensos hepáticos":
''Es importante adquirir este alimento porque es especial para digerirse mejor. Además, también existen complementos alimenticios para que el hígado del gato se recupere de la mejor manera posible'', relata la veterinaria.
2. Tu gato tiene que comer
''Los gatos que sufren hepatitis, por ejemplo, tienen tendencia a dejar de comer, pero sus tutores no pueden permitir eso, puesto que no pueden estar mucho tiempo sin ingerir alimentos'', comenta la doctora.
Siguiendo sus palabras; un gato con problemas del hígado tiene que tomar alimentos húmedos.
3. El suero
En la dieta para gatos con problemas hepáticos, un suero para gatos que no comen es la última opción, según nos cuenta la veterinaria.
Cuando los cuidadores notan que su gato no quiere comer nada: ''Existen sueros reconstituyentes idóneos para cuidar a nuestro animal y forzarlo a que comer'', relata.
3. Opciones naturales
Por otra parte, hay suplementos que provienen de las plantas y que son perfectas para añadir a la dieta de los gatos con problemas hepáticos. Es el caso de la colchicina y el boldo.
La primera se puede adquirir en pastillas en las clínicas veterinarias, mientras que la segunda se puede tomar en infusión y comprarla directamente en las herboristerías.
Sin embargo, no se le debe administrar ninguno de los dos sin antes consultar la situación específica del gato con un veterinario.
Dieta casera para gatos con problemas hepáticos: ¿es posible?
Sí, es posible establecer una dieta casera para gatos con problemas hepáticos, pero es fundamental hacerlo bajo la supervisión de un veterinario para asegurar que la dieta sea adecuada y no empeore la condición del gato.
Los problemas hepáticos en gatos requieren una alimentación cuidadosamente balanceada para apoyar la función hepática y reducir la carga sobre el hígado.
Una alimentación adecuada puede ayudar a que el hígado funcione lo mejor posible y reducir el daño hepático posterior.
De acuerdo con la publicación Veterinary Practice, una dieta para gatos con problemas hepáticos debe cumplir con las siguientes características:
- Rica en proteínas de alta calidad: Deben constituir entre el 30% y el 40% de la energía total de la dieta.
- Moderada en lípidos (grasas): Aproximadamente el 50% de la energía total y debe tratarse de grasas de altacalidad.
- Baja en carbohidratos: Alrededor del 20% de la energía total, y de alta digestibilidad.
Además, es recomendable que cuente con antioxidantes añadidos, como vitamina E, vitamina C y selenio, para combatir el estrés oxidativo.
El primer paso es cambiar la dieta de tu gato a una fórmula que reúna estas características. Hay varios tipos de marcas para elegir en función de las necesidades específicas del gato.
Recuerda que siempre es importante hacer los cambios dietéticos lentamente para aumentar las posibilidades de que el gato acepte la nueva comida.
Si el gato no está dispuesto a comer nada, debe colocarse una sonda de alimentación para evitar un estado energético negativo y el desarrollo o empeoramiento de una lipidosis hepática (síndrome del hígado graso).
Como hemos mencionado, para elegir el tipo de proteína, de grasas y de carbohidratos de la dieta lo ideal es consultar con un veterinario, quien podrá asesorarte de acuerdo con la situación específica de tu gato.
De esta manera, podrás preparar una dieta casera para gatos con problemas hepáticos que responda a todas las necesidades nutricionales de tu felino.
¿Qué puede causar la hepatitis en gatos?
El hígado inflamado en gatos puede deberse a los siguientes motivos:
- Virus o bacterias.
- Medicamentos (sobre todo el paracetamol). "A nuestros clientes siempre les decimos que si existe alguna pastilla mala para los gatos; esa es el paracetamol. Hay que tener cuidado, puesto que algunas veces puede dañar mucho al hígado, ya que va directamente a ese órgano de manera pura", afirma la doctora.
- Pancreatitis.
- Tumores.
- Traumatismos.
- Diabetes.
¿Cómo puedo saber si mi gato sufre hepatitis?
Los síntomas que suelen alarmar a los tutores de gatos son los siguientes:
- Mucosas amarillentas.
- Vómitos.
- Desorientación.
- Cambios de comportamiento.
- Convulsiones.
- Pérdida de apetito.
- Apatía.
Si notas que tu gato sufre alguno de estos cuadros, concierta una cita en tu clínica de confianza para cortar con el problema de raíz y, si así lo considera el profesional veterinario, poner en marcha una dieta para gatos con problemas hepáticos.