La caca de tu perro te dice si está sano o enfermo: ¿cuántos tipos hay?

Cómo es una caca de perro normal

Aparte de ese gesto responsable, diario y, sí, nada agradable de recoger la caca de tu perro, es lógico que no pienses más allá en este tema. Pero un día cuando paseáis y el perro haces sus necesidades, resulta que la caca no es la de siempre.

Algo en su forma, color y textura te hace sospechar que tu perro puede que haya comido algo que no debe, que le haya sentado mal o incluso que esté enfermo. 

El significado de la caca de tu perro te puede dar mucha información sobre su estado de salud. Tu perro está bien cuando...

• El color de la caca sea marrón. 
• Tiene forma de tronco, normalmente en varios trozos. 
• La puedes recoger fácilmente con una bolsa. 

Hasta aquí, todo en orden. Habitualmente los excrementos de los perros son de color marrón “más claros o más oscuros, pero siempre marrón. La tonalidad depende del tipo de alimento que tome: comida húmeda, comida más seca, si el pienso tiene cereal…”, indica la veterinaria Ana Martínez, del Centro Veterinario Albayda. 

Además, sabrás que todo está bien porque “la caca es sólida, con forma de churro o de tronco y la puedes recoger fácilmente con una bolsa sin dejar residuos en el suelo. También que al apretarla –una vez dentro de la bolsa, claro–, no sea demasiado blanda, ni tampoco demasiado dura, que pierda la forma”, puntualiza la veterinaria. 

Mi perro hace caca rara: ¿eso es normal?

Por otro lado, cuando tu perro hace unas necesidades fuera de este patrón es posible que tenga algún problema de salud. Lo que hay que observar es si habitual o puntual y en función de ello, acudir de inmediato a tu veterinario. Sabrás que algo no va bien cuando: 

• La caca es blanda, líquida o demasiado dura.
• Tiene un color diferente. 
• Aparecen pequeños trazos blancos. 
• O cuando tu perro lleva un par de días sin hacer caca.

Tipos de caca de perro con su correspondiente significado

1. El color y la forma de la caca del perro cambian

Según Ana Martínez, el cambio de color se puede deber a varios factores. “Hay tipos de comida que tienen pigmentos que no se digieren y pueden dar una coloración distinta. Por ejemplo, si sales con tu perro al campo y el animal toma mucha hierba, la fibra y la clorofila muchas veces no se digieren bien y es normal que la caca adquiera una tonalidad más verdosa”.

Lo mismo ocurría si el perro se ha zampado un trozo de carbón, no lo va digerir y la caca saldrá muy, muy oscura. “O si echa sangre no digerida seguramente sea porque tiene sangre en la última parte del intestino y la caca saldrá de color rojizo”. 

2. La caca de perro tiene granitos blancos

Otro tipo de excremento sospechoso es “cuando los perros tienen parásitos muy pequeños y se ven como granitos de arroz en las cacas. En cuanto detectemos eso hay que acudir al veterinario, incluso llevar una muestra de caca para hacer un análisis y buscar parásitos”, aconseja la veterinaria. 

3. Cacas blandas

En ocasiones también los perros comen cosas que no deben, ya sea de la calle, algo de casa –ese hocico en el cubo de la basura – o sencillamente algún alimento no le ha sentado bien. Eso puede conducir a que el perro haga una caca blanda. Eso sí, advierte Ana Martínez que “es importante distinguir si son episodios continuados y si va acompañado de vómitos o de falta de apetito. Podríamos estar hablando de gastroenteritis”.

Los perros, al igual que las personas, también se les pueden descompensar la flora intestinal, descomponer un poco esa vía de absorción de agua y sufrir una colitis o diarrea. ¿Cuándo no debemos de dejarlo? “Cuando el perro lleve más de 24 o 48 horas con diarrea. Y si aunque le hagamos en ese tiempo dieta blanda no se le corta, directos al veterinario”. 

Allí se le realizará una exploración física y el profesional te formulará una serie de preguntas para poder saber qué tipo de diarrea es: de intestino grueso, delgado, si le acompañan otros síntomas, dolor nivel abdominal, alguna obstrucción, etcétera. 

4. Otro problema: la caca muy dura   

“También nos podemos encontrar que en lugar de hacer diarreas, nuestro perro esté haciendo cacas muy duras o que incluso esté un par de días sin hacer caca. Más de dos días sin hacer caca y comiendo bien, no sería normal. Ahí sí que nos tenemos que preocupar de llevar al perro al veterinario por puede haber un problema de inflamación o incluso obstrucción”, señala Martínez.  

En cuanto el color, la forma y/o textura de la caca de tu perro sea diferente a lo habitual, es importante observar durante esas primeras 24 o 48 horas si es algo que persiste o no en el tiempo. Y en cuanto comprobemos que sigue, es esencial llevar al perro al veterinario para poner remedio lo antes posible. La salud de tu perro también es importante.