¿Pueden entrar perros en McDonald's?
No existe una prohibición general sobre el acceso de perros en McDonald's. Sin embargo, cada franquicia puede decidir por sí misma si se permite el acceso a perros o no en función de la ubicación del local.
¿En qué McDonald's admiten perros?
Si bien la normativa vigente sobre acceso de perros a bares y restaurantes (Real Decreto 1021/2022) sí permite la entrada de canes en cafeterías, bares y restaurantes, lo cierto es que depende de varios factores.
Dicho esto, resulta difícil dar una respuesta que se aplique a todos los McDonald's de España, por lo que siempre es recomendable anticiparse y contactar con el establecimiento antes de llevar a tu perro contigo para comer.
Día del perro en McDonald's
Algunas franquicias de la cadena de comida rápida han mostrado su compromiso con la causa animal en varios lugares del mundo.
Es el caso de uno de los McDonald's del centro de Madrid (Plaza del Sol), donde el verano pasado celebraron el Día del Perro con charlas sobre bienestar animal, cuentacuentos y snacks para los peludos, entre otras actividades.
Eso sí, queda en el aire si (pudieron y) pueden entrar perros en dicho McDonald's.
¿Qué hago si no pueden entrar perros en el McDonald's al que voy?
Si no permiten la entrada de perros en el McDonald's al que vas, tienes varias opciones:
- Pedir comida para llevar: si no dejan a tu peludo entrar en el establecimiento, puedes optar por pedir comida para llevar y disfrutarla en un área exterior, parque o en casa delante de una buena película.
- Buscar alternativas: puedes buscar otros lugares cercanos donde permitan la entrada de clientes de cuatro patas. Muchos cafés, restaurantes al aire libre o establecimientos pet-friendly pueden ser buenas opciones.
- Preguntar sobre políticas específicas: como hemos señalado ya, la política puede variar dependiendo de la ubicación del McDonald's. Puedes preguntar al personal si hay alguna excepción o si conocen otras cadenas o lugares cercanos que sí permitan la entrada de perros.
Qué no hacer
Dos de los hábitos que tienen muchos tutores de perros es dejar al animal en el coche o atarlo en la calle durante la consumición.
Por otro lado, el artículo 27 de la reciente Ley de Bienestar Animal prohíbe expresamente dejar a un animal atado o vagando por espacios públicos sin la supervisión directa de la persona a cargo de su cuidado, con sanciones que pueden alcanzar hasta los 10 000 euros (artículo 76).