Por qué a mi gato le huele la boca a podrido
El mal aliento en los gatos, especialmente si se trata de un olor fuerte y similar a podrido, puede ser señal de que hay algún problema de salud, principalmente relacionado con la boca o el sistema digestivo.
El mal aliento de tu gato puede deberse principalmente a:
- Enfermedades de los dientes y las encías.
- Faringitis bacteriana.
- Enfermedades orales en los gatos.
- Otras enfermedades de los órganos (hígado, riñones, etc).
- Mala alimentación.
Estas razones pueden hacer que a un gato le huele la boca a podrido.
A continuación te hablamos a detalle de cada una de estas posibles causas del mal aliento de tu gato.
Mal aliento en gatos por enfermedades de los dientes y las encías
La causa más probable si a tu gato le huele la boca a podrido, es alguna enfermedad de los dientes y las encías, como el sarro acumulado, que también es un problema en las mascotas.
El sarro de los dientes es una mezcla mineralizada de sustancias contenidas en la saliva y en los alimentos, que incluye compuestos minerales como el calcio y el fósforo. Por desgracia, esta placa mineral en los dientes es un caldo de cultivo perfecto para numerosas bacterias.
El sarro que se acumula en los dientes del gato puede conducir muy fácilmente a la aparición de gingivitis en el gato e incluso de abscesos alrededor de la raíz del diente.
Si la situación llega a este punto, es normal que al gato le huela mal la boca. Sin embargo, debemos recordar que una enfermedad tan avanzada no se desarrolla de la noche a la mañana.
Faringitis bacteriana
También puede producirse un empeoramiento en el olor del aliento de gato si hay alguna infección, como la faringitis bacteriana.
La fuente directa del mal aliento del gato son los productos metabólicos producidos por los microorganismos en desarrollo.
Enfermedades orales en los gatos
El sarro y las infecciones bacterianas son problemas relativamente menores.
El origen del desagradable olor del hocico del gato puede ser enfermedades mucho más graves, como los cánceres orales -carcinoma de células escamosas y fibrosarcoma, que afortunadamente no se dan con demasiada frecuencia- o la estomatitis linfocítica-plasmocítica.
Mal aliento en gatos por otras enfermedades
Los olores desagradables de la boca del gato también acompañan a algunas enfermedades de los órganos internos. Entre otros, sugiere trastornos hepáticos o renales.
Si a tu gato le huele la boca a podridom puede deberse a la acumulación en la sangre de productos tóxicos del metabolismo -en el primer caso, amoníaco, en el segundo, urea- que, junto con la sangre, llegan a las mucosas de la boca, y luego impregnan el aire que exhala el animal.
A su vez, el claro olor a acetona que sale del hocico de nuestra mascota indica cetoacidosis, que es un síntoma de desarrollo de diabetes en el gato.
De otras enfermedades peligrosas, que se manifiestan por el cambio en el olor del aliento del gato, debemos mencionar también la gripa en gatos. Se trata de una enfermedad vírica que ataca principalmente a los gatos jóvenes y de muy corta edad, y que también se manifiesta con conjuntivitis e inflamación de las vías respiratorias superiores.
La inflamación de las encías, que provoca un olor desagradable, también aparece en enfermedades que debilitan el sistema inmunitario: la leucemia felina y la inmunodeficiencia adquirida o sida gatuno.
Alimentación para gatos poco saludable
Por supuesto, el mal aliento también puede estar causado por una mala alimentación. Esto ocurre cuando los alimentos se acumulan y fermentan en los intestinos.
Hay que recordar que los gatos tienen un tracto digestivo muy corto y adaptado para digerir y absorber alimentos de origen animal y no harina, papas o soya. Incluso la leche puede ser la causa de problemas digestivos en nuestros gatos, aunque comúnmente se percibe como muy saludable.
¿Qué hacer si a mi gato le huele el aliento?
Como se deduce de lo anterior, el mal aliento en un gato tiene su origen principalmente en diversos problemas de salud. Por eso, si a tu gato le huele la boca, lo primero que hay que hacer es acudir a la consulta veterinaria.
Allí, un especialista confirmará o descartará posibles enfermedades, empezando por comprobar el estado de los dientes de nuestra mascota. Y si es necesario, llevará a cabo un tratamiento adecuado o eliminará el sarro.
Junto con el veterinario, se puede analizar la dieta del gato y decidir si es el momento de cambiarla.
Sin embargo, recordemos que la comida más cara no tiene por qué ser la mejor.
En las tiendas podemos encontrar mucha comida preparada, que relativamente no cuesta mucho y es de muy buena calidad.
¿Cómo determinarlo? Pon atención a los ingredientes del alimento, porque es la composición la que demuestra el valor del producto, y no necesariamente el precio.
A mi gato le huele la boca: remedios caseros
Si a tu gato le huele la boca, también es posible darle uno de los complementos alimenticios disponibles en el mercado que contienen clorofila.
Este compuesto obtenido a partir de plantas, algas y cianobacterias es un excelente remedio para el olor desagradable del hocico del gato. Solo tenemos que ser conscientes de que es un remedio que trata los síntomas, ¡no la enfermedad!
Tampoco hay que confiarse cuando se consiga eliminar el origen del problema. Esto, especialmente en forma de sarro y enfermedades periodontales, puede volver rápidamente.
La profilaxis de la cavidad bucal en los gatos consiste principalmente en darles una alimentación adecuada. Recordemos que el gato tiene que masticar y no solo tragar - la masticación provoca una abrasión mecánica del depósito que se acumula en los dientes.
Si alimentamos con comida seca, podemos elegir un producto "dental", que esté diseñado para reducir la acumulación de sarro. También es importante revisar la salud oral de tu gato periódicamente y limpiar los dientes del gato si es necesario.
En este video puedes aprender un poco más sobre el mal aliento gatuno y los posibles problemas que implica.