Hace un mes, en el sur de Hesse, en Alemania, una mujer vivió una experiencia insólita mientras conducía de noche.
En una parada de autobús, la mujer descubrió un inesperado visitante: una criatura, tranquilamente sentada al costado de la carretera mientras se comía unas manzanas.
Un encuentro inesperado
La conductora estaba perpleja. ¿Era aquello un canguro en pleno centro de Alemania?
Tras confirmar que no era producto de su imaginación, llamó de inmediato a la policía, lo que desencadenó en una intervención que rompió con la rutina habitual de los agentes de Darmstadt, situado en el centro del país.
Al día siguiente, la propietaria del animal, una mujer de 54 años residente en la zona, contactó a las autoridades tras notar la ausencia de su inusual animal de compañía. Para su alivio, la informaron de que el canguro estaba sano y salvo.
¿Un canguro de mascota?
Aunque parezca extraño, en Alemania sí es posible tener canguros en casa, siempre que se cumplan unas condiciones estrictas que garanticen el bienestar del animal.
En este caso, la escapada nocturna del canguro terminó sin problemas y se quedó tan solo en un susto. El animal pudo volver a casa con su cuidadora.