¿Qué es el vínculo entre perro y humano?
Por todos es sabido que entre perros y humanos hay una relación especial, esto se debe a que entre ellos y nosotros se puede labrar un vínculo de afecto y respeto.
La unión se forma gracias a una hormona llamada oxitocina, que se segrega tras un período de contacto visual entre perro y humano. Esta hormona es conocida como la hormona del amor, gracias a pasar tiempo con él, al esfuerzo y a la constancia. Todas estas cosas juntas son las culpables de que entre perro y humano haya una relación tan estrecha.
Este vínculo es en parte el responsable de que tu can esté a tu lado, te respete y te haga caso. Pero ten cuidado, porque el vínculo igual que se forja se puede dañar e incluso romper.
¿Cómo se rompe el vínculo con tu perro?
Como hemos mencionado antes, el vínculo es parte esencial en la relación entre tu compañero perruno y tu. Hay muchas cosas que fortalecen el vínculo, pero este también se puede dañar o romper, todo depende de como trates a tu can.
Que el vínculo se rompa puede hacer que tu perro te haga menos caso en las actividades diarias como el paseo, que rehúse de obedecer con normas básicas. También es posible que esté más distante o que no quiera tantos mimos.
Es muy importante que no agredas a tu perro físicamente, esto sin duda alguna rompe todo el vínculo, lo único que consigues es que te tenga miedo.
Si lo obligas a hacer cosas que no quiere o que le dan miedo, el vínculo se debilita, dependiendo de el grado de negación del perro está directamente relacionado con cuánto se lastima el vínculo.
¿Por qué mi perro me ignora?
Hay muchos motivos por los cuales a tu perro le cuesta más hacerte caso o directamente no te lo hace. Que el vínculo se dañe solo es uno de ellos.
1. Por el tipo de educación
El tipo de educación que le des a tu can es muy importante. Por tanto, utiliza la educación en positivo (premia a tu compañero siempre que haga algo bien o cuando finalice una orden como con golosinas). Si le das órdenes a tu perro y no le premias, hará que no las obedezca con la rapidez que puedes querer.
Las órdenes deben ser cortas y concisas y calmadas. Si le das una orden y no obedece, no se la repitas constantemente, esto los bloquea y hace que no las puedan seguir. Espera a que piense y una vez lo haga debes premiarle (con comida, con un cariño o con palabras).
2. Por la falta de claridad
Otro punto muy importante para que tu compañero perruno no te ignore y obedezca tus órdenes es que seas constante y consecuente. Es decir, si le dices que no a una cosa, debes decirle que no siempre a lo mismo, si una vez se lo permites, siempre se acordará de esa vez y lo intentará hasta la saciedad.
Un fallo muy habitual y que muchos cometemos, es pronunciar el nombre de nuestro perro cuando le regañamos porque hace algo mal. Esto puede hacer que tu can deje de venir cuando le llamas o cuando le pides, ya que puede asociar su nombre a algo malo y dejar de responder a él.
3. Fallo comunicativo
Por último y no menos importante hay muchas conductas no deseadas que por mucho que intentes corregir a veces no cambian. Debes trabajar la comunicación con él para entender qué está fallando.
Si tu perro destroza cosas en casa, no te sirve de nada gritarle, pero sí pueden intentar sacarle más a pasear o buscar juegos que estimulen su mente para no solo cansar su cuerpo. Esto suele ayudar.
Si mi perro me ignora ¿ya no me quiere?
Ni mucho menos. Que tu perro te ignore solo significa que hay algo que no estás sabiendo entender o que no estás sabiendo hacer.
Lo más importante es que busques el punto de conflicto y que te pongas a trabajar en ello. Recuerda premiar cada acción que haga. Mira mucho a tu perro y dale muchos mimos. Se consecuente con las órdenes y constante. Sácale a pasear y trabaja con él.
Estos consejos te ayudarán a que el vínculo con tu compañero sea y se mantenga fuerte, en caso de debilitarse podrás fortalecerlo poco a poco para que se restaure la complicidad y volváis a estar tan unidos como siempre.