¿Tu perro tiene por costumbre lamerse los genitales? ¿Te has preguntado alguna vez por qué lo hace?
Aunque parece de lo más normal, en ciertos casos, especialmente cuando la frecuencia es alta, puede tratarse de una señal de alerta o de la causa subyacente en un problema serio de salud.
Así pues, saber si el lamido puede ser un problema es crucial para comprender a tu peludo amigo y poder identificar posibles problemas de salud.
A continuación, exploramos las razones detrás de por qué los perros se lamen los genitales.
Una práctica equivocadamente asociada a la sexualidad
A menudo, muchos tutores le llaman la atención a sus canes cuando los encuentran con el hocico debajo de la cola o en el ano de otros perros.
Aunque el lamido en los perros puede resultar desagradable para los humanos e incluso generar vergüenza, es importante comprender que, contrariamente a lo que algunos creen, el perro podría darse lengüetazos en los genitales debido a un trastorno de salud.
Por ende, evitar que el perro realice esta conducta no resuelve el problema y puede incluso generarle frustración.
En lugar de prohibirlo sin más y menospreciarlo, es conveniente explorar las causas de este comportamiento.
¿Por qué los perros se lamen los genitales?
Los perros que se chupetean sus partes íntimas lo hacen normalmente como parte de su rutina diaria de aseo.
Dada su naturaleza, los perros no tienen otra opción más que encargarse de su propia higiene, y lamer se presenta como la única forma disponible para ello.
¿Higiene íntima o un posible problema de salud?
Durante esta conducta, es esencial observar algunas señales de alerta que indican que tu perro no (solo) se está lavando sus genitales.
Glándulas perianales inflamadas
Esta condición es relativamente común, y se manifiesta cuando estas glándulas perianales se bloquean.
En condiciones normales, estas secreciones no son perceptibles para nosotros. No obstante, en algunos casos, las glándulas pueden bloquearse, provocando una interrupción en la secreción y generando picazón intensa o infección, que lleva al perro a lamerse las partes íntimas.
En situaciones más extremas, el perro puede lamerse de manera persistente y arrastrar el trasero por el suelo.
Alergia o presencia de parásitos
La irritación en el área anal, que motiva al perro a hurgarse en esta región, podría ser el resultado de alergias alimentarias, aunque también podría señalar la presencia de parásitos internos u hongos.
En perros macho, el lamido puede ser también una respuesta a la picazón en los testículos.
Un problema de conducta
Asimismo, la higiene en los genitales puede derivar de un problema de conducta.
Meter la cabeza entre las patas y chupetearse debajo de la cola puede ayudar al animal a lidiar con problemas de aburrimiento o estrés. Lo mismo ocurre cuando el perro se hurga las patas frenéticamente.
Mi perro se lame sus partes: ¿cómo evitarlo?
Para responder a esta pregunta, es preciso dar con la causa real del lamido. En cualquier caso, esta conducta compulsiva nunca debe pasar desapercibida y es más que aconsejable consultarla con un veterinario/a.
- Si se sospecha un problema con las glándulas perianales, es necesaria la intervención de un profesional para vaciar las glándulas y extraer el líquido.
- En caso de alergias o parásitos, es vital administrarle al animal un vermífugo o antiparasitario adecuado.
- Si tu perro muestra otros signos típicos de estrés, entonces debes buscar la fuente de este estrés e intentar eliminarlo.
Lamentablemente, a veces este comportamiento está tan consolidado que, a pesar de la falta de un factor de estrés, el perro sigue lamiéndose.
En este caso, necesitarás la ayuda de un experto en comportamiento canino que te proporcionará formas eficaces de abordar el problema.