El jengibre es considerado un remedio importante en naturopatía. Este tubérculo amarillo puede tener efectos beneficiosos tanto en personas como en animales, siempre que se utilice de manera adecuada.
¿Pueden los perros comer jengibre? ¿En qué casos es mejor evitarlo?
¿Los perros pueden comer jengibre?
Sí, el jengibre es generalmente beneficioso para los perros.
Se recomienda utilizar jengibre seco en lugar de fresco, ya que este último tiene un sabor más fuerte e intenso que podría resultar molesto para ellos.
Beneficios del jengibre en perros
Su fama como remedio natural proviene de sus componentes, especialmente los aceites esenciales y gingeroles responsables de su sabor picante.
Además, el jengibre puede aliviar ciertos síntomas en los perros, especialmente aquellos relacionados con una menor producción de jugo gástrico.
El jengibre y el mareo en los perros
Gracias a sus propiedades antioxidantes, el jengibre es útil para los perros para calmar la sensación de náuseas y mareos.
Cantidad que pueden los perros comer jengibre
Este alimento debe considerarse como un remedio ocasional, no como parte de su dieta diaria. La dosis recomendada es de 1 a 2 gramos de jengibre por cada 10 kg de peso corporal y siempre bajo supervisión veterinaria.
Si tu perro no tolera bien el sabor picante, puedes optar por jengibre en polvo o en cápsulas. En caso de utilizar jengibre fresco, mézclalo con su comida para suavizar su sabor intenso y facilitar su consumo.
¿Los perros pueden comer galletas de jengibre?
Existen galletas de jengibre especialmente elaboradas para perros, como las que se venden en El Corte Inglés y otras tiendas especializadas.
En cuanto a las galletas para humanos, no se recomienda que los perros coman galletas de jengibre, ya que generalmente contienen ingredientes como azúcar, especias (como nuez moscada) y otros aditivos que pueden ser perjudiciales para su salud.
¿Los perros pueden comer galletas de jengibre sin azúcar?
Aunque las galletas de jengibre sin azúcar pueden parecer una opción segura, es importante tener precaución si contienen xilitol, un edulcorante artificial común en productos sin azúcar, ya que es extremadamente tóxico para los perros.
¿Cuándo no pueden comer jengibre los perros?
En situaciones específicas, el jengibre puede generar problemas en los perros debido a sus propiedades anticoagulantes y su capacidad para estimular la circulación sanguínea. Esto resulta especialmente peligroso en las siguientes circunstancias:
- Perras gestantes: el aumento del flujo sanguíneo podría inducir un parto prematuro, poniendo en riesgo tanto a la madre como a los cachorros.
- Antes de cirugías: el jengibre no debe administrarse antes de intervenciones quirúrgicas, ya que podría dificultar la coagulación.
- Estómagos sensibles: en cantidades, el jengibre puede irritar el tracto gastrointestinal y causar náuseas, dolor de estómago o diarrea; en definitiva, los mismos síntomas que se buscan aliviar.
Especias perjudiciales para perros
Aunque algunas especias pueden aportar beneficios a los perros, otras representan un riesgo significativo para su salud.
Cebolla en polvo
Incluso pequeñas cantidades pueden causar dolor intestinal, vómitos o diarrea. Además, contiene sustancias que dañan los glóbulos rojos, lo que puede derivar en anemia y otros problemas graves.
Ajo en polvo
Al igual que la cebolla, el ajo también es tóxico para los perros.
Nuez moscada
Esta especia puede causar daños severos al estómago, al sistema nervioso e incluso provocar la muerte del animal.
En definitiva, los perros pueden comer jengibre en pequeñas cantidades, siempre que sea como tratamiento puntual y bajo supervisión veterinaria.
Sin embargo, a menos que se trate de galletas especialmente elaboradas para perros, las galletas de jengibre no son recomendables debido a su contenido en azúcar y otros ingredientes perjudiciales.