¿La mimosa es tóxica para los gatos?

En muchas ocasiones, tenemos plantas, flores e incluso árboles en casa y no nos preguntamos necesariamente si son perjudiciales para la salud de nuestros felinos. 

Es el caso de la mimosa o acacia de Constantinopla, presente tanto en jardines y parques como en zonas urbanas y suburbanas. 

¿Tienes un árbol en el jardín, un arbusto cerca de casa o un ramo de sus flores en casa? ¿Sabes si la mimosa es tóxica para los gatos?

La mimosa: consideraciones previas

Antes de nada, conviene precisar que el término "mimosa" abarca todo un género de árboles y arbustos, además de sus flores: Mimosa pudica, Mimosa hostilis, Mimosa strigillosa, Mimosa biuncifera y Mimosa pigra, entre otros.

En este consejo, nos centramos en una de las más populares, la Mimosa pudica o mimosa sensible, denominada así por su capacidad de reaccionar al tacto y al calor cerrando rápidamente sus hojas.

¿La mimosa es tóxica para los gatos?

La mimosa no aparece en la lista de referencia mundial sobre plantas y flores tóxicas de la ASPCA (American Society for the Prevention of Cruelty to Animals), lo que sugiere que la planta no representa un peligro para los gatos.

Sin embargo, la organización sí advierte que cualquier ingestión de plantas, aunque no sean peligrosas, puede provocar molestias gastrointestinales en los felinos. 

Así pues, dada la amplia variedad de especies dentro del género y la falta de referencias específicas y fiables sobre su toxicidad, es prudente vigilar de cerca a tu gato, especialmente si muestra signos de malestar o comportamiento inusual.

¿Qué pasa si mi gato mordisquea flores de mimosa?

Aunque la mimosa no se considera venenosa para los gatos, los síntomas de envenenamiento por plantas pueden variar dependiendo de la sensibilidad individual del animal, y podrían incluir:

• Problemas digestivos: vómitos y diarrea.
• Problemas neurológicos: convulsiones, pérdida del equilibrio, pupilas dilatadas y temblores.
• Problemas respiratorios: arritmias cardíacas o dificultad para respirar.
• Otros síntomas: edemas, hipersalivación e insuficiencia renal en casos más graves.

Es fundamental tener en cuenta la seguridad de nuestros amigos felinos, ya que muchos son propensos a explorar su entorno e ingerir plantas. 

Qué hacer en caso de intoxicación

Si tu gato presenta síntomas de intoxicación, es crucial buscar atención veterinaria de inmediato, llevando una muestra de la misma o anotando su nombre para ayudar al especialista a identificar la toxina. 

Los síntomas graves como la sensación de asfixia, salivación excesiva, diarrea, vómitos, colapso o crisis nerviosas requieren intervención veterinaria urgente. 

Aunque en algunos sitios dedicados a este tema se mencione la posibilidad de inducir el vómito en caso de intoxicación, es esencial seguir las recomendaciones del veterinario (por ejemplo, llamándolo antes de acudir a la clínica), ya que algunos compuestos pueden causar más daño al ser regurgitados, especialmente si han ocasionado daño en el esófago o el estómago.

Prevención

Es interesante que te informes sobre la variedad de mimosa que tienes en casa.

A continuación, tienes una lista de las plantas tóxicas para gatos y perros más comunes en nuestros hogares:

Si, por el contrario, ya tienes varias plantas en casa y desconoces su toxicidad, lo primero que has de hacer es observar a tu gato. 

• Si el animal es de los que ignora por completo las plantas, bastará con asegurarse de que no las ingiera. 
• Si, por el contrario, es de los que se acuesta encima de las macetas o de los que mordisquea las flores, conviene limitar el acceso de las plantas o distraer la atención del felino con juguetes o con otras plantas seguras, como la hierba gatera.