Cuarentena y home office: más allá de las diferencias -que sin duda ya has comprobado- entre las expectativas y la realidad de trabajar desde casa, los humanos que tienen perro, igualito que los papás de niños pequeños, tienen un problema evidente: la concentración.
No es sencillo concentrarte en tu compu cuando Fido te está trayendo todo el rato la pelota o trata de convencerte de salir a dar una vuelta... a fin de cuentas, depende por completo de ti, le gusta y necesita que le pongas atención.
Trabajar desde casa con mi perro: alegrías y sinsabores
No siempre es fácil concentrarse en casa a la hora de ponerse a trabajar. Si no se cuenta con un espacio adecuado, si hay otros miembros de la familia que nos distraen... puede llegar a ocurrir que las tareas tomen más tiempo del que suelen tomar en la oficina.
Y esta dificultad se acentúa si tenemos un alegre perrito rondando por ahí. Por un lado, los perros están ciertamente contentos de tener a su familia en casa, pero al mismo tiempo, su rutina está alterada, los paseos reducidos: todo esto contribuye a ponerlo nervioso.
Es necesario entonces manejar la situación de la mejor manera para combinar nuestro trabajo eficaz y nuestro feliz peludo. No es sencillo, pero se puede y te damos los mejores consejos para lograrlo.
Los consejos de Wamiz
Acabas de sentarte frente a tu compu con las mejores intenciones de trabajar al máximo, cuando Fido llega a mirarte con sus ojotes para pedirte apapachos y cariñitos: ¿cómo decirle que no?
Es muy difícil resistirse a esa carita, pero tratar de trabajar mientras le rascamos las orejitas puede que acabe en un muy muy baja productividad.
A fin de cuentas, le habremos dedicado poco tiempo -y de mala calidad- al perro y habremos trabajado poco y probablemente mal.
El resultado será que le hemos dedicado poco tiempo al perro, e igualmente hemos frenado el ritmo de producción: hacer dos cosas a la vez nunca es una buena idea.
Nuestros consejos básicamente, son los siguientes:
- Cansa a tu peludo lo más que puedas, para que te deje trabajar en paz.
- Ofrécele juegos con comida, para que se mantenga ocupado.
- Haz pequeñas pausas de vez en cuando para ponerle atención.
- Relájalo.
A continuación, te explicamos cada punto a detalle.
Ejercicio con tu perro
Aunque no podemos sacar a pasear al perro tanto como nos gustaría, hay muchos recursos que podemos usar para que saque el vapor.
Justo antes de empezar tu trabajo, procura sacar a tu peludo a dar un pequeño paseo respetando todas las reglas de Sana Distancia, eligiendo lugares poco concurridos y limitándote al tiempo indispensable. Si es posible regresen a casa corriendo, para que saque un poco más de energía.
Al volver a casa, si tienes suficiente espacio, puedes lanzarle la pelota varias veces, ya sea en el jardín, en un cuarto amplio o en una terraza.
Juegos que lo entretengan
Si todavía no es hora de que coma, pero le dio hambre y te pide atención y comida mientras tú intentas trabajar, puedes usar un recurso que nunca falla: el Kong.
El Kong, así como otros juguetes similares, tienen la particularidad de entretener a tu perro con un desafío que estimula su mente y sus sentidos para que al final obtenga un sabroso premio.
Un poco de pan, crema de cacahuate o un poco de comida húmeda pueden ser un relleno ideal que lo mantendrá ocupado, a veces por más de unas horas.
Si no tienes un Kong, un frasco casi vacío de crema de cacahuate también puede funcionar y tendrá el mismo efecto estimulante en tu peludo.
Un break para ambos
Por supuesto, para trabajar bien es necesario hacer pequeñas pausas cada cierto tiempo: esto nos ayuda a mantenernos concentrados y a aliviar el estrés.
¡Y no hay mejor manera de pasar nuestros diez minutitos de descanso que con nuestro demandante mejor amigo! Unos cariñitos, juegos breves, una plática y apapachos nos harán sentir mejor a ambos y te dejarán con la mejor actitud para seguir trabajando.
Relajación natural para nuestro peludo
¿Sabías que a los perros les gusta la música? Ok, quizá no es fan de los mismos géneros que tú, pero sin duda puedes encontrar muy relajante la música que lo ayuda a tranquilizarse a él.
Puedes encontrarla en YouTube, en Spotify o hasta en CDs, si es que tienes alguno. Seguramente esa relajante música nos ayudará a concentrarnos mientras el peludo toma una rica siesta cerca de nuestros pies.