El tamaño de un perro influye significativamente en su alimentación.
Los perros de diferentes tamaños tienen necesidades nutricionales distintas debido a sus metabolismos, niveles de actividad, y las demandas físicas de su cuerpo.
Los perros de razas grandes o gigantes, como el gran danés o el san bernardo, tienen una tasa de crecimiento más lenta y, a menudo, requieren alimentos formulados específicamente para apoyar un desarrollo saludable de sus huesos y articulaciones.
Además, estos perros suelen necesitar dietas que controlen el aporte calórico para evitar el sobrepeso, ya que su tamaño hace que sean más propensos a problemas articulares como la displasia de cadera.
Por otro lado, los perros de razas pequeñas, como el chihuahua o el yorkshire terrier, tienen metabolismos más rápidos y, por lo general, necesitan alimentos más densos en energía para satisfacer sus altas necesidades calóricas sin tener que consumir grandes cantidades de comida.
Además, el tamaño del croqueta en los alimentos también debe adaptarse al tamaño de la boca del perro, para facilitar su ingesta y masticación.
Entonces, ¿cómo debe ser la alimentación para perros grandes?
Alimentación para perros grandes: las claves
Los perros grandes se caracterizan por tener un período muy largo de crecimiento y un tracto digestivo más corto que el de otros perros, con una reducción significativa de su expectativa de vida, lo que a su vez implica un envejecimiento más temprano.
El ritmo de crecimiento de un cachorro de raza grande debe ser monitorizado para poder combatir el desarrollo de problemas en sus huesos y articulaciones.
Algunos puntos a los que hay que prestar atención en la alimentación para perros grandes son:
- Los alimentos sin demasiada grasa y en porciones del tamaño adecuado, ayudan a limitar el aumento diario de peso.
- Los niveles de proteínas no tienen ningún efecto en el ritmo de crecimiento.
- La administración no controlada de suplementos de calcio es particularmente peligrosa para los cachorros.
- Un perro adulto de raza grande tiene una tolerancia digestiva relativamente baja.
- Estos perros necesitan alimentos altamente digeribles y con suficiente densidad energética para asegurar que el volumen de comida no sea excesivo.
- La elección de un alimento de fácil digestión y rico en calorías ayuda a prevenir la dilatación o torsión gástrica
- Agregar antioxidantes naturales (vitaminas E y C) a la comida y reducir la cantidad de fósforo son las primeras medidas para ayudar a los perros a lidiar con la última etapa de sus vidas en las mejores condiciones posibles.
Ten en cuenta que desde los seis años de edad en adelante, los perros grandes se vuelven más frágiles y vulnerables.
Para ayudar a mantenerlos en buenas condiciones, la alimentación para perros grandes debe consistir en una dieta muy apetecible y bien balanceada, compuesta por ingredientes de alta calidad: proteínas lácteas, pescado, aminoácidos combinados con elementos traza, etc.
Este enfoque te ayudará a mejorar la calidad de vida de tu perro y extenderá su tiempo de vida.
Alimentación para perros según su tamaño
Razas grandes
- Periodo de crecimiento extenso (alrededor de 14 meses): evitar el exceso de grasas.
- Riesgo de problemas en los ligamentos: evitar el exceso de suplementos de calcio.
- Baja tolerancia digestiva: ofrecer comida altamente digerible.
- Riesgo de torsión estomacal: elegir alimentos de alta densidad energética para reducir el volumen de las porciones.
Razas pequeñas
- Perros "difíciles" (dietas mal balanceadas debido a que los propietarios les ofrecen alimentos destinados a los humanos): proveer una dieta canina altamente apetecible.
- Problemas digestivos comunes: preferir porciones pequeñas de alimentos altamente digeribles.
- Crecimiento rápido: proveer una dieta con una alta concentración de ingredientes que estimulen el crecimiento.