Cuando estás en casa con tu perro no puedes pretender que tu mejor amigo peludo esté siempre en echado en la cama, ignorándote totalmente.
Igual que tener un perro implica dedicarle tiempo para su educación y bienestar, también es importante el tiempo de juego con él. Jugar con tu perro es una forma de reforzar vuestro vínculo y esto debes hacerlo tanto fuera como dentro de casa.
Juegos para perros en casa: la lista completa
- Escondite con comida y/o objetos.
- Escondite con personas.
- ¡Atrapa el juguete!
- Tira y afloja.
- El trilero.
- Dame la pata.
- Juegos mudos para perros.
- El juego de la puerta de casa.
- ¿Me dejas el juguete?
- La caja de cartón: No solo es cosa de gatos ?
Diferentes maneras de jugar con tu perro en casa
El juego con tu perro es otro modo para relacionaros entre vosotros. No todo va a ser pasear, recurrir a ese ‘no’ cansino en su educación –error que hemos cometido todos–, o ponerle la comida. A los perros les encanta jugar, especialmente contigo.
1. El hocico del perro y el escondite
Para un perro olisquear es vital, desfogan energía y a la vez obtienen mucha información de su entorno. Poner en marcha un juego en el que el olfato sea el protagonista estimulará mucho a tu perro. A este juego puedes jugar de diferentes maneras:
- Escondiendo comida y objetos.
- Escondiéndote tú.
Para lograr una mayor motivación, si has elegido la opción de la comida, lo ideal es utilizar olores que sean desconocidos para tu perro. Elegidos dichos olores, deja que tu perro lo olfatee un poco y después, esconde el trozo de comida en algún rincón de la casa para que vaya a buscarlo. Durante ese proceso de búsqueda estarás estimulando su sistema nervioso a través de palabras y gestos.
Si has optado por esconderle uno de sus juguetes, apuesta siempre por el más llamativo -en cuanto a colores- o su peluche preferido.
Por otra parte, si deseas jugar al escondite con tu perro de manera tradicional necesitarás otro participante. La dinámica del juego es que la persona escondida llame al perro mientras que la otra le marca las pautas que debe seguir a través de comandos tales como ''¿dónde está?'', ''¡busca a...!'', ''venga, encuéntralo''!...
El escondite potencia la capacidad de concentración y búsqueda del perro a través del olfato, así como su obediencia a órdenes sencillas y el desarrollo del oído.
2. ¡Atrapa el juguete! ¡A por el juguete! ¿Me dejas el juguete?
He visto perros que son felices atrapando piñas durante una excursión por la sierra, otros que lo flipan con un… ¡palooo (como el mítico anuncio de Ikea)!, y otros que no necesitan más que un trozo de cuerda. Sea el objeto que sea jugar con tu perro a que atrape ese juguete le ayudará física y mentalmente.
En relación con los juguetes para perros existen varias opciones para jugar que van desde lanzar, tirar y aflojar o pedir prestado su juguete preferido a tu perro. Cualquiera de las opciones mantendrá a tu perro activo mental y físicamente porque le permitirá estar alerta de lo que puede ocurrirle a su peluche preferido.
Una opción muy válida para casa es atar una cuerda a un extremo del palo y en el extremo de la cuerda, atar un juguete. Te llevas todo este cachivache contigo, te escondes tras una pared o una puerta y lo pones sobre el suelo, pero cerquita de ti para que lo puedas controlar. Vas moviendo el invento para llamar la atención de tu perro y una vez acuda a esa llamada, puedes ir mareando el palo para aumentar el ritmo de juego. Tu perro se pondrá muy excitado con el objetivo de cogerlo.
3. El tira y afloja
Otro juego es ¡el tira y afloja! Es posible que sea el juego que más le gusta a Chufa, la perra de servidora. En este caso, el perro en cuestión te trae su pelota, su peluche o una sencilla cuerda y a tirar cada uno para un lado hasta que gane el mejor.
Este juego de tirar y tirar hace que tu perro esté en estado de alerta y ayuda a su condición física. Con que uses el juguete que más le guste, habrá motivación de sobra. Ojo, cuidado también con el que escoges. Lo suyo es que sea resistente y suave a la par y tira siempre en línea recta (nunca hacia arriba) para evitar en ese tira y afloja que tu perro sufra algún daño en sus dientes.
4. El trilero
El juego del trilero para perros es igual al de los humanos. Lo único que cambia es que en vez de ganar dinero, el premio es una chuchería canina.
Lo único que tienes que hacer es esconder la golosina bajo un cubilete que se coloca junto a otros dos cubiletes vacíos y mezclar. De esta forma y a través de su olfato y capacidad de observación, el perro deberá averiguar dónde está su premio para poder comérselo.
5. Dame la pata: cómo enseñar a tu perro ?
Un juego/truco muy divertido. A continuación te dejamos varios tips en vídeo ??
6. Juegos mudos en casa
Este juego es perfecto para enseñar a tu perro a andar con correa. Ponle el collar y la correa y... ¡qué el paseo comience! Sin darle indicación verbal y solo teniendo en cuenta los pies de su humano, el perro deberá detectar cuando frenar, reanudar la marcha, etcétera.
Ideal para padres primerizos que quieran fomentar la concentración del cachorro. ?
7. El juego de la puerta
Perfecto para ayudar a tu perro a gestionar la ansiedad por separación. El truco consiste en jugar en la puerta de casa para que el animal permanezca tranquilo cada vez que su humano tenga que salir. Y se realiza de la siguiente manera: abres la puerta de casa y le vas dando al cachorro la orden de ''atrás'' y ''quieto'' mientras tu sales y cierras la puerta varias veces seguidas.
El objetivo es que el perro desarrolle su autocontrol y evitarle cuadros de estrés en el futuro.
Nota de la redactora: No sé vuestro perro, pero Chufa (la mía) es muy de… “uy, mamá se ha tumbado en el sofá, le voy a traer la pelota”, y como es la reina de la casa, ¡llegó la hora de jugar! Una cosilla más: sea el juego que sea, no te olvides de darle de vez en cuando una chuche-premio a tu perrete ?